Unas semanas después de la denuncia de Alberto Nisman contra Cristina Kirchner por presuntamente encubrir a prófugos iraníes por el atentado a la AMIA, la Procuración del Tesoro comandada por Angelina Abbona se presentó para decir que ese escrito era "un entramado ficcional". Periodismo para todos reveló la existencia de varios mails en los que se muestra que abogados que tenían una función estatal trabajaron exclusivamente para intentar evitar que prospere la acusación del fiscal.
"La Procuración del Tesoro actúa en el fuero civil y comercial y en el administrativo. Pero es raro que actúe en el fuero penal. No había denuncia sobre el Estado, sino funcionarios. Personas. No había legitimación", señaló el fiscal general Germán Moldes, que denunció en su momento a la procuradora del Tesoro por peculado.
Moldes duda de que la entidad hiciera la presentación para aportar información. El objetivo que buscaba era otro. "Supongamos que lo hiciera para aportar algo: la rapidísima resolución de Rafecas desoyendo lo que decía la nota de Nisman, se basó en lo que presentó La Procuración. Malversaron los fondos del Estado en beneficio propio: por eso es peculado", sostuvo.
PPT mostró varios mails en los que se ve el intercambio de datos entre funcionarios de dependencias diferentes del Estado y abogados. El 16 de marzo de 2015 Horacio Diez le envía a Abbona un correo en el que sostiene que Moldes era contradictorio en su denuncia.
Él dice que no es peculado, pero en la postdata apunta: "Reconozco que no pude evitar deslizar alguna que otra ironía sobre el fiscal. Si la resolución la hubiese firmado yo solo hubiese puesto que su denuncia revela que es un conchudo, que es para la RAE ser sagaz, astuto. Moldes lo es porque advirtió que, al presentar la documentación estábamos defendiendo a la Presidenta y al Canciller". De esta manera picante, el letrado amite que Moldes fue sagaz y dio en el clavo.
Otra abogada que aparece es Graciana Peñafort. A través de otro correo mandado a Abbona, la letrada apuntó sobre un texto judicial que había redactado, también para contrarrestar parte de la denuncia de Nisman: "Le envío el escrito con el objeto de hacerle el trabajo cuesta arriba al buen hombre. Entendemos que no va a prosperar, pero puede que sirva para complicarle la existencia".
Finalmente en esta cadena de mails que le llegaban constantemente a Abbona, aparece Julio Alak. El exministro de Jusicia le mandó a Abbona el 12 de marzo de 2015 un correo en el que le advirtió con lujo de detalles todas las audiencias previstas sobre denuncia de Nisman y memorándum con Irán.
