El juez federal Julián Ercolini procesó a la expresidenta Cristina Kirchner por asociación ilícita y ordenó un embargo por 10.000 millones de pesos. Es en la causa por el direccionamiento de obras públicas viales al grupo Austral Construcciones. También fue procesada por administración fraudulenta agravada. Según la denuncia de los fiscales de la causa, Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques, hubo durante el kirchnerismo una "decisión en lo más alto del Poder Ejecutivo de enriquecer con fondos públicos al titular de esa empresa, Lázaro Báez, que paralelamente les garantizaba a los Kirchner ingresos millonarios a partir del alquiler de sus establecimientos hoteleros".
Ercolini dispuso además el procesamiento y embargo de los exfuncionarios Julio De Vido y José López y al empresario K Lázaro Báez, entre otros.
Los otros procesados y embargados
El juez Ercolini dispuso el procesamiento también del exministro de Planificación, Julio De Vido; su mano derecha, el exsecretario de Obras Públicas, José López; el extitular de Vialidad Nacional, Nelson Guillermo Periotti; el primo de Néstor Kirchner, Carlos Santiago Kirchner y el empresario detenido Lázaro Báez, quien se presume que fue beneficiado con la concesión irregular de obras.
La Justicia investiga si el dinero del Estado otorgado a Báez volvía a los Kirchner de manera ilícita a través de los negocios inmobiliarios de la familia. A todos ellos les corresponde el embargo de 10 mil millones de pesos.
También fueron procesados y embargados con un monto menor: Osvaldo Daruich, Mauricio Colladera, Héctor René Jesús Garro, Juan Carlos Villafañe, Raúl Gilberto Pavesi y José Raúl Santibáñez.
El magistrado dictó además la falta de mérito a otras cinco personas, entre ellas el exsubsecretario de Obras Públicas, Abel Fatala.
El testigo que complicó a Cristina en la Justicia
Hace semanas, el programa A Dos Voces de TN accedió al testimonio de Martín Leonardo Cergneux, un exempleado de Vialidad Nacional de Santa Cruz que precisó la manera en la que Néstor y Cristina Kirchner instrumentaron un plan sistemático para enriquecerse a costa del Estado. "Las empresas del grupo Báez cobraban mucho más rápido que las demás", sostuvo el testigo.
Cergneux trabajó en Vialidad en dos períodos clave: entre 2005 y 2006, y luego fue a planta permanente hasta julio de 2008, años en los que se gestaron los primeros negociados.
La defensa de la expresidenta
A fines de octubre, Cristina Kichner estuvo cara a cara con el juez Ercolini. Durante más de una hora, la expresidenta hizo una presentación oral, no respondió las preguntas del magistrado y pidió la nulidad de la causa. "No soy amiga, ni socia comercial de Báez", le dijo al magistrado. Además, insistió en que se realice un peritaje en toda la obra pública nacional.
Cristina hizo una defensa política en la que aludió a la reasignación de fondos, al mecanismo de asignación de obra pública a cargo del Congreso Nacional y aludió a la figura de asociación ilícita que, dijo, pretende imputársele con una manera "que tenía la dictadura para perseguir líderes políticos".
Como muchas otras veces, usó su tiempo en la Justicia para atacar a Mauricio Macri. Denunció supuestas irregularidades en la licitación y financiación del soterramiento del ferrocarril Sarmiento, adjudicado a una unión de empresas que integra IECSA, de Angelo Calcaterra, primo del presidente.
