La Corte Suprema de Justicia autorizó a cuatro jueces federales porteños a viajar a Estados Unidos para buscar información relacionada con las causas por presunta corrupción de la multinacional brasileña Odebretch con funcionarios argentinos.
La autorización comprende a los jueces Sebastián Ramos, Daniel Rafecas, Sebastián Casanello y Marcelo Martínez de Giorgi, y llega después de que el presidente Mauricio Macri acusó públicamente a la procuradora Alejandra Gils Carbó de taponar datos en Brasil.
Después de eso, el ministro de Justicia Germán Garavano viajó a Estados Unidos y se llevó el compromiso de la administración de Donald Trump para colaborar con la investigación.
De hecho, el viaje se realizará a instancias y por gestión del Ministerio de Justicia argentino, según se desprende de la documentación firmada hoy por los cinco jueces del máximo tribunal.
Los jueces viajarán "con motivo de la invitación cursada por el Coordinador de Asuntos Internacionales del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, embajador Eugenio María Curia". El diplomático "es autoridad central de aplicación del Tratado de Asistencia Jurídica Mutua en Asuntos Penales con Estados Unidos", indicó la Corte.
Los jueces fueron autorizados (ahora falta el mismo trámite por parte de la Procuración General de la Nación) para asistir a "la reunión de trabajo a realizarse entre jueces y fiscales argentinos y fiscales de la Unidad FCPA (corrupción/sobornos extranjero) del Departamento de Justicia de aquel país".
Esa reunión está prevista para "intercambiar información con relación a causas en trámite sobre dichas materias en las respectivas jurisdicciones vinculadas al caso denominado Odebretch, entre otras", precisa la Resolución 1802 de la Corte.
