El empresario Alberto Samid, que tenía una orden de captura por faltar a dos audiencias en el juicio por asociación ilícita, anunció que no se va a presentar ante la justicia. "Mientras tanto, voy a seguir en la clandestinidad", aseguró, en diálogo con TN.
// Ordenan detener a Alberto Samid por faltar al juicio por evasión impositiva
"No me voy a presentar con estos ladrones. Prefiero ser prófugo que preso político. Soy opositor a este Gobierno y sé que esto es un problema político y económico. Este es un Gobierno de ladrones y se han robado todo", señaló el "Rey de la Carne".
El dirigente peronista está siendo buscado por la policía, mientras que en los tribunales federales de Comodoro Py avisaron a su defensa que tiene la posibilidad de presentarse por sus propios medios. "Mientras no me metan en cana, voy a contar todo lo que hicieron estos tipos. Sé que voy a perder en algún momento", agregó.
Samid es juzgado por supuesta asociación ilícita, sobre la base de una investigación abierta en 1996 por evasión impositiva en sus frigoríficos. La causa estaba a punto de prescribir por el tiempo que pasó desde la supuesta comisión del delito, por lo que Tribunal Oral en lo Penal Económico (TOPE) 1 decidió iniciar el juicio el 18 de marzo pasado, y fijar audiencias durante los fines de semana.
En la entrevista, el dirigente contó que se presentó hace tres semanas por la causa por asociación ilícita, pero al terminar la audiencia aseguró que un fiscal le pidió dinero. "Me pidió 1,8 millones de dólares para solucionar un problema de una causa de 30 años que estaba cerrada. Yo lo denuncié a los medios. Pensé que algún fiscal la iba a levantar. No lo iba a denunciar en la justicia porque iba a quedar preso", explicó.
El denominado "Rey de la Carne" había sido sobreseído en la vieja causa judicial por evasión millonaria de impuestos cuando el Tribunal Oral en lo Penal Económico determinó que se habían vencido los plazos para el desarrollo de la investigación. "La evasión está totalmente terminada, lo único que quedó fue asociación ilícita de una empresa de 110 años sin ningún delito. Estoy sobreseído por la evasión y no está afectado mi buen nombre y honor", explicó.
La causa había sido impulsada por la entonces Dirección General Impositiva durante los años noventa cuando el entonces dirigente peronista fue acusado de liderar una "poderosa asociación ilícita" para evadir impuestos por más de 50 millones de pesos a través de varias cadenas frigoríficas entre las que figuraba La Lonja. Además del empresario, son juzgados su hermana Alicia y otros sospechosos.
"Hace 60 años que estoy trabajando en la empresa que construyó mi abuelo. Vendemos carne y tenemos un frigorífico. Eso es todo lo que hemos hecho. Ahora nos quieren encontrar con la contadora y dos o tres empleados una asociación ilícita", criticó sobre la causa en su contra que consideró que es "política y no jurídica".
