En alerta por el freno de la obra pública, las deudas previsionales, los cambios en el IVA que impulsa el Gobierno nacional y el reclamo de un nuevo esquema impositivo, los gobernadores preparan una cumbre para el 3 de junio. Asistirían varios dialoguistas, mientras negocian un acuerdo electoral con el presidente Javier Milei.
El juego doble refleja el cambio de época, en la que por primera vez asumió la presidencia un dirigente sin ningún gobernador de su mismo signo político, pero que supo convertir en aliados a mandatarios provinciales opositores, que fueron clave para el blindaje parlamentario que consiguió en la primera mitad de su mandato.
En lo inmediato, el oficialismo buscará garantizar el apoyo en el Congreso al proyecto del uso de los “dólares del colchón” sin justificar ingresos, con el que el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, intenta quitar presión sobre las reservas del Banco Central, entre otras iniciativas.
Pero además, este año el Presidente buscará aumentar las bancas propias y aliadas en el Parlamento para facilitar el tratamiento de proyectos que serán fundamentales para las reformas pendientes, como la previsional y la laboral, que tiene en carpeta.
En eso trabaja Karina Milei, armadora política de La Libertad Avanza, que teje acuerdos por distritos con el PRO y los gobernadores dialoguistas.
Cumbre de gobernadores
Entre los gobernadores aliados crece el malestar con el Gobierno de Milei por las últimas decisiones que viene adoptando, pero también hay un reconocimiento de que no se pueden perder de vista los tiempos políticos.
El alto ausentismo, signo de la disconformidad de la sociedad con los dirigentes, y el buen resultado electoral que tuvo LLA en las primeras seis elecciones del año, es leído por los mandatarios provinciales como un mensaje de que no es momento para romper, pero tampoco para bajar las banderas. Por eso, están dispuestos a negociar con LLA, pero sin dejar de señalar lo que creen que está mal.
En ese contexto, preparan para el 3 de junio una cumbre de gobernadores, como un espacio para encontrar coincidencias entre opositores y aliados a Milei, pero también para ratificar posturas contrapuestas.
El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, confirmó que participarán mandatarios “de las distintas provincias y de los distintos signos políticos”, con la idea de “conversar, evaluar y analizar la situación” actual, la que calificó como “cada vez más grave”.
Según pudo saber TN, participarían el entrerriano Rogelio Frigerio y el chubutense Ignacio Torres, entre otros gobernadores que están acomodando sus agendas.
“El presidente toma decisiones unilateralmente que afectan a los intereses de todos los argentinos y a esto hay que ponerle un corte, pero veremos qué dice el resto de los gobernadores y veremos si podemos trazar un camino todos juntos para poder modificar esta situación muy grave que atraviesa la Argentina”, señaló Quintela, uno de los opositores más duros con Milei.
La posición difiere entre los aliados al Gobierno libertario, que creen que es momento de mantener las negociaciones en pie, incluso en acuerdos electorales al estilo del chaqueño Leandro Zdero. Sin embargo, podrían acordar avanzar en temas en común, como por ejemplo, la necesidad de reactivar la obra pública, fundamentalmente en infraestructura vial.
Los mandatarios de la región centro, aliados a Milei, también vienen alzando la voz respecto de las retenciones agropecuarias y las deudas de Nación con las cajas previsionales provinciales (en su mayoría judicializadas).
Sin embargo, los cambios en el IVA y la habilitación para usar ahorros en dólares no declarados empiezan a marcar diferencias entre los mandatarios aliados y los opositores.