Mientras todavía se debate sobre la posibilidad de cerrar un acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza en la Provincia de Buenos Aires, hay quienes exploran la chance de reflotar una vieja alianza: Juntos por el Cambio. Las tensiones con los libertarios animan a un sector del partido fundado por Mauricio Macri a no descartar ese escenario.
En los últimos días, el senador nacional y referente de la UCR en la provincia, Maximiliano Abad, se mostró con el intendente de Junín, Pablo Petrecca, quien es uno de los dirigentes de peso del PRO en PBA. Si bien en el entorno del radical le bajaron el tono al encuentro, la foto fue elocuente en el contexto de avanzadas negociaciones con LLA.
Leé también: La nueva interna libertaria en PBA, la jugada que prepara CFK y el freno a la “neo dolarización” del Gobierno
Según pudo saber TN, desde hace tiempo Petrecca busca reflotar Juntos por el Cambio en la provincia. Y va por más: busca alinear a todas las fuerzas opositoras al kirchnerismo, incluida La Libertad Avanza. En Junin siempre se mantuvo JxC, con funcionarios de la UCR y la Coalición Cívica en el gobierno municipal y un Concejo Deliberante en la misma línea.
“El gobierno de la provincia no va más y hay que empezar a trabajar ahora para realmente poder presentar una propuesta en las próximas elecciones generales ejecutivas”, anticipó a este medio un entusiasta armador del PRO en el interior bonaerense.
Leé también: El Gobierno busca acelerar un acuerdo en Provincia con el PRO y la UCR para apaciguar la interna
“Los intendentes están planteando las realidades de sus distritos, y que en el diálogo, que es lo que hoy se está dando, sean tenidas en cuenta para un acuerdo”, indicó a este medio un dirigente del PRO del interior.
En este escenario, el radicalismo busca recuperar el protagonismo perdido en el escenario político, aunque el contexto de alta polarización no lo favorece. Por eso, analiza conformar alianzas con uno u otro lado de la grieta.
Una de las opciones que se barajan es la de reeditar Juntos por el Cambio -vigente en muchos distritos- con el agregado del oficialismo nacional. Quienes auspician este acuerdo priorizan derrotar al kirchnerismo por sobre sus reparos morales sobre el liderazgo de Javier Milei.
Es una posición incómoda para un sector del radicalismo, aunque no se trata de un debate nuevo: ya se vivió una discusión similar cuando se unieron al PRO, con el que llegaron al poder en 2015. Allí también hubo fuertes discusiones sobre los valores del espacio fundado por Mauricio Macri, pero no les impidió acompañarlo.
“Personalmente, observo que en el radicalismo del interior ve con alguna simpatía a LLA”, señaló a TN un legislador provincial que además es armador del partido en la provincia. “Se da un fenómeno similar al que pasó con (Mauricio) Macri en 2014-2015″, remarcó.
El caso es que hay quienes impulsan un entendimiento en la dirección contraria. En este grupo prima el rechazo al gobierno de Milei, hecho que los acerca a su principal competidor, Axel Kicillof.
Esta alternativa hoy es la que tiene menos probabilidades, en especial porque a priori es incompatible con quien hoy conduce al radicalismo bonaerense, Maximiliano Abad. Si bien en su entorno sostienen que “habla y tiene diálogo con todos”, sus principales críticas son hacia el kirchnerismo.
En las filas de Abad señalan que quienes impulsan ese acuerdo están cerca del presidente de la UCR nacional, Martín Lousteau. No obstante, el senador es más propenso a armar un espacio de centro que a un acercamiento con el kirchnerismo. Pero tiene un límite más claro y es Milei.
