El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se presentará como querellante y recusará a la jueza Karina Andrade por su decisión de liberar a los detenidos tras los incidentes ocurridos el miércoles en las inmediaciones del Congreso durante la marcha de jubilados.
Así lo confirmó el ministro de Justicia porteño, Gabino Tapia, quien aseguró que Andrade “tiene una tendencia que va más acorde a lo que se conoce como el garantismo o estar a favor de aquel que comete una infracción o un ilícito y no de aquellos que cumplen la ley”.
Leé también: Quién es la jueza que ordenó liberar a los detenidos en la marcha de los jubilados
Tapia aseguró que lo ocurrido en el Congreso el miércoles fue “una locura, un ataque a las instituciones y en particular también nosotros lo consideramos en la ciudad un ataque a los porteños”, dijo en declaraciones a Radio Rivadavia.
El ministro detalló que los daños ocasionados por la “organización delictiva que vinieron a hacer a las zonas aledañas al Congreso le costaron a la ciudad y a todos los porteños más de 400 millones de pesos”. Gabino agregó que los destrozos incluyen “89 contenedores, 2 patrulleros, 4 motos, 89 contenedores de basura. Se rompió la vía pública, el mobiliario urbano, locales comerciales de particulares”. Y agregó: “No fue una manifestación, sino un ataque no solo a las instituciones federales, sino también a todos los porteños”.

Las declaraciones de Tapia se suman a las del jefe de gobierno porteño, Jorge Macri, que el jueves habló de un “sistema organizado” y dijo que más de la mitad de los detenidos tenían “graves antecedentes penales, por violación reiterada a la ley de drogas, atentado y resistencia a la autoridad, infracción al artículo 183, daños, robo, arrebato, infractores a la ley 451 de manera reiterada, hurto y lesiones”.
“Vamos a llevar frente a la Justicia a todos los detenidos. Hay una causa abierta. Y la vamos a perseguir hasta el final. Ayer vimos a grupos violentos muy organizados que vinieron a sembrar el caos y la destrucción. Que vinieron a romper, quemar, lastimar a los policías y no los dejamos. La violencia no tiene justificación política”, dijo el jefe de gobierno.