Tras la expulsión de Edgardo Kueider del Senado, el kirchnerismo presiona para que el correntino Carlos “Camau” Espínola renuncie a su banca. La Cámpora busca así sumar otro legislador propio tras la expulsión del entrerriano aliado al presidente Javier Milei y la asunción en su lugar de Stefanía Cora (UxP).
La agrupación que lidera Máximo Kirchner apunta a ganar espacios de poder de cara al armado de las listas para las elecciones legislativas del año próximo. Ya consiguió una banca en el Senado y ahora quiere incorporar a Ana Almirón.
La última incorporación a la Cámara alta dejó al Frente de Todos a solo tres votos del quórum propio. Almirón reduciría esa cifra a apenas dos y le daría al kirchnerismo grandes oportunidades de negociación.
En ese contexto, la expresidenta Cristina Kirchner, como titular del Partido Justicialista, tiene en agenda visitar Corrientes antes de marzo, cuando vence la intervención del partido en esa provincia.
En paralelo, dirigentes cercanos presionan para que el exregatista deje su banca. “La alianza entre Kueider y Espínola es dudosa”, dijo la senadora Teresa García en Radio Con Vos y pidió que el fiscal la investigue. El medallista olímpico fue uno de los seis senadores que votaron en contra de la expulsión de su par detenido en Paraguay.
El kirchnerismo va por los peronistas aliados a Javier Milei
A medida que Milei fue sumando aliados del peronismo, el malestar en el kirchnerismo fue creciendo. Si bien Cristina Kirchner asumió la presidencia del PJ con la promesa de sumar dirigentes, la propuesta no incluye a los que consideran “traidores”, que fueron electos por el peronismo y poco después se convirtieron en piezas clave para el avance del ajuste de La Libertad Avanza.
Kueider era uno de los apuntados y el haber sido encontrado con más US$ 200.000 no declarados en la frontera con Paraguay le dio al kirchnerismo el motivo perfecto para sacarlo de su banca. Incluso consiguió el respaldo de la oposición dialoguista. El medallista olímpico también está en la mira y quieren que sea el siguiente.
Espínola rompió con el Frente de Todos en 2022 y conformó un bloque propio, al que se sumó Kueider. Ese grupo incluye a legisladores que se definen como “peronistas no kirchneristas”. Sus votos fueron clave para que Milei consiga su primer triunfo legislativo, con la aprobación de la Ley Bases y el paquete fiscal.
“Si hubiera sido al revés, las senadoras serían las compañeras y no estaríamos rogando para que no voten por la entrega de la patria”, escribió una usuaria en X antes de que el Senado aprobara la iniciativa del oficialismo, con la imagen de las boletas del FdT de Entre Ríos y de Corrientes, que encabezaron Kueider y Espínola. Cristina Kirchner lo reposteó y se generó una catarata de críticas del espacio kirchnerista a ambos dirigentes.
El enojo fue dirigido a los dos senadores, pero también al expresidente Alberto Fernández, a quien La Cámpora responsabiliza por haberlos puesto como cabeza de lista en sus provincias.
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Luego de que votara a favor de la Ley Bases, el PJ correntino echó a Espínola y exigió su desafiliación. “Siento vergüenza, porque yo lo acompañé en la boleta. No vamos a permitir que venga, con la estructura del Partido Justicialista, de Unión por la Patria y el Frente de Todos, a querer nuevamente mentirles a los correntinos, a decirles que los va a defender y cuando se va a Buenos Aires parece que se olvida”, dijo Almirón, la camporista que se prepara para reemplazarlo en caso de que el kirchnerismo logre su salida de la Cámara alta.
El peronismo suma pases de facturas internas
El PJ sufrió el primer quiebre tras la alianza del gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, con el Gobierno de Milei. El mandatario -anfitrión de la firma de Pacto de Mayo- para acompañar la Ley Bases, rompió el bloque peronista en la Cámara baja y llevó a los tres diputados que le responden (Agustín Fernández, Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla) a conformar el bloque “Independencia”. En el Senado, le dio a LLA un voto clave, el de Sandra Mendoza, que acompañó el RIGI.
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Otro gobernador peronista que selló una alianza con Milei fue el catamarqueño Raúl Jalil, que llamó a acompañar la Ley Bases. Sin embargo, los cuatro diputados de su provincia por UxP votaron en contra, y en el Senado, Guillermo Andrada votó a favor del RIGI, pero Lucía Corpacci se mantuvo firme en el rechazo de ambas iniciativas.
Con la renovación de autoridades y la asunción de Cristina Kirchner, el PJ se encamina a iniciar una purga de peronistas no k y todas las flechas apuntan al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, cuestionado por haberse desmarcado de la expresidenta.
