El Gobierno apuesta a romper el acuerdo del bloque de Unión por la Patria para sumar votos en artículos clave de la Ley Bases y el paquete fiscal en el Senado. El Ejecutivo apunta a captar adhesiones del bloque peronista mediante acuerdos con los gobernadores del espacio.
Según pudo saber TN, uno de los puntos que la Casa Rosada busca blindar es el capítulo que incluye el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI). En Balcarce 50 sostienen que cuentan con el apoyo del senador de UP Guillermo Andrada -que responde al mandatario Raúl Jalil (Catamarca)- y buscan articular el de Sergio Uñac (San Juan).
El catamarqueño visitó ayer al jefe de gabinete, Guillermo Francos, para acordar la financiación de obra pública por parte de Nación y firmar un convenio para que el oficialismo le ceda algunos proyectos a la provincia.
Estuvo la semana pasada también en Balcarce 50 Osvaldo Jaldo (Tucumán) y hoy Gustavo Sáenz (Salta) tiene una reunión con el titular de los ministros por el mismo tema. El Ejecutivo quiere perforar Unión por la Patria con estos contactos, como con el intento fallido de tentar a Gerardo Zamora (Santiago del Estero).
El Gobierno sostiene que cuenta con al menos 37 adhesiones para la sanción en general de la Ley Bases y el paquete fiscal, pero reconoce que no tiene los votos asegurados para ratificar el tratamiento del articulado.
Definen el capítulo de la restitución de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias como uno de los puntos más tensos y mantienen que no dan por seguro el apoyo de los gobernadores patagónicos, a los que les ofrecieron un régimen especial de un piso más elevado.
Ponen la mira además en la lista de empresas públicas a privatizar que entró en el dictamen final y buscan desarticular la oposición a Aerolíneas Argentinas y el Correo. “Si sacan esas empresas de la lista, van a quebrar porque las vamos a desfinanciar”, expresó un funcionario a TN.
Lo mismo aplica para el blanqueo de capitales: lo señalan como uno de los puntos que puede llegar a tener una contrarrestación fuerte en el recinto. “Vamos a negociar hasta el último momento, pero hay puntos en los que la suerte ya está echada”, manifestó un cercano a la mesa chica de Balcarce 50.
Apuntan además contra el senador de la UCR Martín Lousteau y buscan vincularlo directamente con el kirchnerismo. “Está alineándose con un bloque que no es el suyo y trabaja en paralelo para darle lugar a modificaciones que su bloque no acordó”, expresó un dirigente del oficialismo.
La mesa chica del Ejecutivo espera que sea una sesión larga y no descarta interrupciones ni negociaciones en un cuarto intermedio. No está confirmado todavía si Francos o su vicejefe, José “Cochi” Rolandi, visitarán el Congreso mañana.
Lo que está confirmado es que el Gobierno decidió correr operativamente de sus funciones al secretario parlamentario, Omar de Marchi, aunque siga nombrado. Se está definiendo quién lo reemplazará.
En Balcarce 50 sostienen que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, ya prepara el operativo para contener las movilizaciones al Congreso y descartan la posibilidad de retirar la ley ante un escenario de modificaciones. Aseguran que buscarán insistir con el proyecto original en Diputados en ese caso.