aLa lista de ministros y funcionarios del kirchnerismo que pusieron a disposición del presidente Alberto Fernández su renuncia no incluye a algunos nombres del riñón de Cristina Kirchner que ocupan cargos clave que la Vicepresidenta no está dispuesta a perder.
Esta lista está compuesta, entre otros, por el Procurador del Tesoro de la Nación Carlos Zannini, el titular de la Inspección General (IGJ) de Justicia Ricardo Nissen, exabogado de los hijos de la Vicepresidenta y la titular de la AFIP Mercedes Marcó Del Pont.
Se trata de funcionarios que cumplen tareas en áreas de sumo interés para la Vicepresidente de la Nación. A modo de ejemplo, en noviembre del año pasado, Nissen desestimó una denuncia contra el Instituto Patria por falta de transparencia y la Corte Suprema de Justicia archivó el caso. La denuncia había sido presentado por el propio organismo durante el gobierno de Macri, acusación que buscaba que el edificio que funciona como usina de ideas K brinde explicaciones de sus ingresos y aportantes.
Hasta el momento pusieron a disposición sus renuncias el ministro del Interior Eduardo “Wado” de Pedro; Martín Soria (ministro de Justicia); Roberto Salvarezza (Ciencia); Tristán Bauer (Cultura); Juan Cabandié (Ambiente); Luana Volnovich (PAMI); Fernanda Raverta (ANSES); Paula Español (secretaria de Comercio Interior); Victoria Donda (INADI); Martín Sabbatella (Presidente de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo); Pablo Ceriani (titular de Aerolíneas Argentinas); y Jaime Percick (viceministro de Educación).
Durante las últimas horas diversos referentes de la oposición cuestionaron que Zannini, Nissen y Del Pont no hayan puesto a disposición su renuncia y vincularon esta decisión con resguardar lugares clave para el frente judicial de Cristina Kirchner. El Procurador del Tesoro lleva adelante, además, el pedido de quiebra de la empresa Correo Argentino, de la que son accionistas la familia Macri. El 18 de agosto pasado el funcionario ratificó esta decisión a través de un escrito en el que consideró que “no existe una propuesta de pago acorde que tengan en cuenta los intereses punitorios del caso”.
En el caso de Del Pont, pocos días atrás se conoció que la AFIP le otorgó a los empresarios K Cristóbal López y Fabián de Sousa un plan de pago en 97 cuotas para que puedan saldar la deuda de $8.000 millones que mantienen con el Estado. El organismo les otorgó una tasa menor a la inflación, según el acuerdo al que accedió TN.com.ar. Es en relación al pasivo por no haber abonado el Impuesto a la Transferencia de Combustibles (ITC) de parte de la empresa petrolera Oil Combustibles.
Entre los funcionarios que aún no presentaron su renuncia se encuentra la interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), que en rigor mantiene un buen vínculo con Cristina Kirchner y el propio Alberto Fernández.
Otro de los apuntados por la oposición fue Gerónimo Ustarroz, hermano de Eduardo “Wado” de Pedro, representante del Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, otro puesto clave para el kirchnerismo duro.
Alberto Fernández espera un gesto de Cristina Kirchner
En el gobierno de Alberto Fernández entienden que ahora es momento de que la vicepresidenta Cristina Kirchner tenga un gesto de gobernabilidad y tienda un puente para comenzar a negociar de qué manera continuará con vida la coalición de gobierno que llegó a la Casa Rosada en 2019.
El Presidente resistió durante todo el miércoles la embestida de la titular del Senado, que ordenó a sus funcionarios que pongan a disposición su renuncia para forjar las salidas de Martín Guzmán (Economía) y Santiago Cafiero (Jefe de Gabinete), y entiende que con el respaldo del resto de los ministros, gobernadores peronistas e intendentes es Cristina Kirchner la que ahora debe hacerse cargo de la crisis institucional y comenzar un camino de diálogo para resolver el futuro.
Según pudo saber TN.com.ar de fuentes cercanas a la Vicepresidenta, desde el kirchnerismo duro pedían en la noche del miércoles “bajar el tono” de un conflicto que ellos mismos habían desatado. La tormenta política más importante que atravesó el Frente de Todos desde su arribo al poder en diciembre de 2019. Unas 12 renuncias que tuvieron lugar a tan solo 72 horas de la derrota electoral del espacio en las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO).