El gobernador Gustavo Sáenz reforzó su poder en la provincia de Salta. Con el 32,17% de los votos ganó las elecciones legislativas Emilio Durand, alfil del jefe de Gobierno provincial y cabeza de la lista Unidos por Salta. En segundo lugar quedó Juntos por el Cambio, con casi 15 puntos menos y en cuarto el Frente de Todos, arañando el 10% de los votos.
“No pedí la bendición de ningún dirigente nacional que venga a levantarme la mano. Me conformé con la bendición de los salteños”, dijo el gobernador tras conocerse el resultado provisorio de los comicios
En medio de la pandemia de coronavirus, la participación rozó el 65% (64,39%), con estrictos protocolos sanitarios y campaña de vacunación.
De acuerdo con los datos del escrutinio, Durand le sacó 14,69 puntos porcentuales a Martín Grande Durand, de Juntos por el Cambio, que alcanzó el 17,48%.
En tercer lugar se ubicó Gana Salta, otra lista que responde a Sánez en alianza con una fracción del PJ y que llevó a Matías Posadas a la cabeza, que obtuvo el 11,87% de los votos escrutados. Recién en cuarto lugar está el Frente de Todos, que encabezó la lista con Pamela Ares, y que quedó con el 9,12% de los votos.
“Nuestro compromiso es trabajar a la par de todos los salteños. Hemos formado un equipo maravilloso. Tenemos en claro hacia donde vamos. Aquí no hay grietas ni resentimientos, acá hay amor por salta. Encontramos los puntos de encuentro, las cosas que nos unen”, escribió Sáenz en su cuenta de la red social Twitter.
Según dijo, hoy “nace un nuevo movimiento en Salta, un movimiento provincial donde abrimos los brazos a todos los que quieran acompañarnos para sacar a la provincia adelante. Este grupo de hombres y mujeres va a trabajar unido para mejorar la calidad de vida de los salteños”.
“Felicito de corazón a quienes resultaron electos en este día tan importante para la democracia. Solo trabajando juntos vamos a salir adelante”, agregó.
Poco antes de expresarse a través de las redes sociales, el gobernador salteño había hablado desde el búnker de Unidos por Salta. Allí apuntó contra la grieta y se despegó del apoyo de los referentes de los principales partidos políticos. “No pedí, ni quise la bendición de ningún dirigente nacional que venga a levantarme la mano. Me conformo con la bendición de los salteños y de Dios”, afirmó en ese contexto.
Para todos los gobiernos las elecciones legislativas funcionan como una especie de plesbiscito de su gestión. “Después de momentos tan difíciles que venimos viviendo en este año y medio de gestión, revalidar y pedirle a los salteños que nos acompañen en este proyecto político que empezó a gestarse en el 2015 con partidos políticos de distintas ideologías que quieran acompañar y decidieron hacerlo sin despojarse de sus ideologías, hay radicales, peronistas, renovadores, independientes”, recordó Sáenz.
