Durante la reunión realizada el jueves entre el oficialismo y parte de la oposición convocada por el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, hubo coincidencias en priorizar la cuestión sanitaria en medio de la ola de contagios por el coronavirus. En este marco, los representantes del Gobierno propusieron que las PASO se realicen el próximo 12 de septiembre y las elecciones generales el 14 de noviembre.
En este sentido el ministro del Interior Eduardo “Wado” de Pedro, que también participó del encuentro, acordó con los referentes del bloque de Juntos por el Cambio avanzar en la conformación de una comisión de seguimiento de la pandemia, integrada por las distintas fuerzas con representación en el Congreso.
Esta comisión está pensada para monitorear y analizar los distintos indicadores de salud, y también las acciones con el Comité Operativo de Emergencia (COE).
En la reunión también se discutieron algunos proyectos de reforma electoral, dejando en claro que es el Congreso el responsable de legislar en esta materia, tal como fija la Constitución. Se habló puntualmente del proyecto de un sector del radicalismo (de Emiliano Yacobitti y Carla Carrizo), que propone la postergación de un mes de las PASO y la elección general.
En base a eso, el ministro -tal cual se comprometió en el encuentro- envió a las autoridades del bloque de Juntos por el Cambio una propuesta borrador para modificar el calendario electoral “por única vez” y “en contexto de pandemia”, con el objetivo de que sea discutido por las distintas fuerzas que integran la coalición.
El proyecto propone:
Fechas:
PASO: segundo domingo de septiembre.
Generales: segundo domingo de noviembre.
Oficialización de listas y candidaturas/Inicio de campaña: 45 días antes de la elección.
Principales Fundamentos:
“Este aplazamiento permitirá dejar atrás el período de bajas temperaturas y mayor circulación de enfermedades respiratorias y avanzar en la campaña de vacunación”.
“Además, las fechas propuestas permiten respetar todos los plazos fijados por el Código Nacional Electoral, salvo dos excepciones: con el propósito de garantizar un plazo suficiente para la realización del escrutinio definitivo de las PASO, el proyecto propone reducir de 50 a 45 días previos a la elección general el plazo para que las juntas partidarias proclamen sus candidatos”.
“En un régimen democrático representativo y republicano, la pandemia nos plantea el desafío de garantizar el pleno ejercicio de los derechos políticos individuales y colectivos y la transparencia del proceso electoral en un contexto excepcional en el que debemos evitar la aglomeración de personas y su desplazamiento en transporte público, y a su vez implementar las medidas sanitarias necesarias para contener la propagación del virus”.
Por otra parte, ante el planteo del bloque de Juntos por el Cambio de realizar una serie de reformas al sistema electoral, “Wado” de Pedro aclaró que los cambios en la metodología son impracticables con un calendario electoral en marcha. Sin embargo, se resolvió avanzar en la integración de una comisión para que el Congreso y el Poder Ejecutivo discutan propuestas para mejorar el sistema electoral argentino.
