Los sospechosos del crimen de Araceli Fulles (22), la chica que fue encontrada enterrada en una casa de José León Suárez, fueron a una audiencia al Juzgado de Garantías N° 1 de San Martín, a cargo de Martín Porto. A la salida, fueron brutalmente agredidos.
Vecinos y familiares golpearon e insultaron a tres detenidos. Cuando se retiraba el camión que debía trasladarlos, uno de los vecinos le tiró una piedra a la caja.
En las próximas horas, se definirá si siguen con prisión preventiva Diego Gastón "Darío" Badaracco, principal sospechoso; su hermano, Hernán Badaracco; Carlos Cassalz, dueño del corralón donde trabajaba Darío y los empleados Marcelo Ezequiel Escobedo y Hugo Martín Cabañas.
El viernes 26 de mayo, tres personas habían recuperado la libertad por falta de mérito: Marcos Ibarra, a quien no pudieron probarle que conociera a la víctima; y Joanathan y Emanuel Ávalos, hermanos de uno de los policías implicados por encubrimiento agravado. Según consta en el expediente judicial, Emanuel fue la última persona en ver con vida a Araceli y él mismo declaró que mantuvo una relación sexual con la chica después de un asado.
