El juicio por la denominada "Batalla del tablón" ocurrida en mayo de 2007 en el estadio de River llegó a su fin y se resolvió condenar a Adrián Rosseau a tres años y ocho meses de prisión. Además, lo inhabilitaron de manera perpetua para ir a la cancha.
Por otra parte, los jueces absolvieron a otros dos acusados, Matías Goñi y Cristian Pineda, a quienes la fiscal de juicio, Dafne Palópoli, no había acusado al momento de los alegatos. Antes de conocer el veredicto, Rousseau pronunció sus "últimas palabras" y aseguró que no estuvo en el playón del River cuando se produjo la "batalla".
Sin embargo en su alegato, la fiscalía argumentó que sí estuvo y planteó que la motivación del ataque fue "mostrar poderío y recuperar el mando de la barra con intenciones económicas”. Esto fue lo que llevó a los agresores a atacar con armas “a los del bando contrario” de la barra, liderado por los hermanos Alan y William Schlenker.
Los hermanos y otros tres imputados fueron condenados perpetua en 2011 por el crimen de Gonzalo Acro, asesinado de dos balazos en la cabeza el 7 de agosto de 2007, cuando salía de un gimnasio en Villa Urquiza.
