Se abrió un nuevo capítulo en la investigación por la muerte y desaparición de Paula Perassi, un caso que estuvo lleno de giros judiciales. Ahora, los ocho acusados que habían sido procesados y detenidos el 20 de abril de este año y después, a raíz de un polémico fallo, liberados con cauciones de entre 30 mil y 100 mil pesos, podrían volver a la cárcel.
Por la causa, que está caratulada como "aborto sin consentimiento seguido de muerte", se procesó al matrimonio de Roxana Michl y Gabriel Strumia, quien mantenía una relación extramatrimonial con la víctima y se presume era el padre del bebé que esperaba. También se atribuye ese delito a Mirtha Ruzñisky, una misionera acusada de haber sido la que le practicó el aborto que le causó la muerte.
Por su parte los policías Gabriel Godoy, Aldo Gómez, María José Galtelli, Jorge Enrique Krenz y Adolfo Daniel Puyol, ex jefe de la Agrupación Cuerpos de la UR XVII, están todos acusados de haber sido encubridores en calidad de coautores.
Su cuestionada liberación dio lugar a la presentación de un recurso de inconstitucionalidad al que ahora hizo lugar la Justicia.
EL CASO
El 18 de septiembre de 2011 Paula Perassi, de 34 años y madre de dos hijos, salió de su casa en San Lorenzo, Santa Fe, y nunca más se supo de ella. Estaba casada, pero su matrimonio estaba terminado y sólo compartían la casa. Su amante era Gabriel Strumia, y pocos días antes de su desaparición se confirmó que estaba embarazada.
Se cree que este embarazo podría haber sido el desencadenante de lo que le pasó.
