Giselle Rímolo quedó detenida y fue trasladada en ambulancia a una clínica privada con custodia. La mujer que a principios del milenio solía aparecer en televisión como médica y recetar pastillas y medicamentos incluso a enfermos terminales y embarazadas no tiene nada que ver con cómo está ahora: visiblemente desmejorada, con sobrepeso y problemas de salud.
Rímolo está acusada de ejercicio ilegal de la profesión. El caso más grave fue el de Lilian Díaz, de 41 años, que murió el 30 de junio de 2001 tras ingerir durante cinco meses pastillas y gotas para adelgazar que le habría recetado la falsa médica. Pero hubo muchas víctimas y, entre ellas, famosos.
El conductor Silvio Soldán, su pareja de entonces, era uno de los que se sometía a los tratamientos que, supuestamente, reducían el apetito hasta un 90 por ciento.
Otro de sus pacientes era el periodista Tití Fernández. “Tomaba pastillas de Rímolo sin saber qué tenían”, dijo en su momento.
También Paulo Vilouta fue víctima de Rímolo. El periodista acudió a su clínica porque necesitaba bajar de peso y casi pierde la vida. "Cada vez que iba porque tenía un problema lo único que querían era sacarme plata”, aseguró.
“La gente veía en Rímolo la posibilidad de bajar rápidamente de peso. Esta mujer era una reina en su clínica. Cada vez que ella entraba a la clínica era como que lo hacía un Dios. Iba mucha gente grande a su clínica y que tenían problemas de salud”, contó Vilouta.
