Los 2.200 efectivos, la tanqueta, los camiones, camionetas y patrulleros, los dos helicópertos y los drones que entraron por las dos avenidas que rodean la villa 1-11-14 lo hicieron tan sincronizados que no dieron tiempo a resistencia ni reacción de los narcos buscados. Mientras avanzaban primero los infiltrados y después los uniformados, el apoyo aéreo monitoreó todos los movimientos del predio.
En los 90 allanamientos se secuestraron drogas, armas, granadas y hasta un artefacto que investigan si tenía explosivos. Hay 15 detenidos. Gendarmería y Policía Federal buscan identificar a todas las personas que quedaron vinculadas al mega operativo, ya que en algunos casos son menores, o sólo fueron demorados por pasar por el lugar y no están vinculadas a las bandas narco.
Los helicópteros y drones se mantienen sobre la villa, que quedó rodeada de controles policiales que revisan a todos los vehículos y peatones que entran y salen. Además de drogas y bandas narcos, se buscaban talleres clandestinos.
