Como si fueran dueños de casa, cuatro delincuentes entraron a un edificio con su propia llave, recorrieron los pasillos y hasta saludaron a los vecinos que pasaban. Tenían un objetivo preciso y hasta tuvieron tiempo de tocar timbres para chequear que estuviera vacío. No forzaron una sola cerradura, se llevaron de todo y salieron comiéndose el paquete de papas fritas de su víctima.
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Fue el sábado 4 de noviembre, a las cuatro de la tarde, en un complejo de dos torres de Balvanera. Uno de los delincuentes, vestido de traje, era el que simulaba ser el anfitrión de los otros tres. Matías, el usuario de TN y la Gente que subió el video de todo el accionar, contó en comunicación con TN.com.ar, que primero tocaron varios timbres de varios departamentos de la torre del fondo. Eso encendió las alarmas, porque su "confusión" no parecía genuina.
Los primeros tres minutos los usaron para entrar y analizar su objetivo. Departamento vacío, puerta accesible, ningún testigo a la vista. Volvieron a la puerta de calle, tocaron otra vez el timbre y como nadie respondió volvieron al ataque. En diez minutos abrieron la puerta, se cargaron computadoras, electrodomésticos y tecnología en bolsas y mochilas y salieron charlando como si fueron un grupo de amigos disfrutando del fin de semana. El delincuente de traje hasta le sostuvo la puerta a dos chicas para dejarlas pasar.
Matías, en el mismo momento fue a dejar una bolsa de basura abajo. Se había quedado con una sensación extraña después de que le toquen el timbre estos visitantes "confundidos". Cuando salió, vio que la puerta de uno de sus vecinos estaba abierta. Cuando volvió a pasar uno minutos después, seguía igual. Llamó al encargado y atando cabos notaron que su vecino no estaba y que le habían entrado a robar. Los cuatro delincuentes quedaron registrados por las cámaras de seguridad del edificio.
