Acoso, abuso, violencia física y violación son algunas de las acusaciones que recaen sobre cinco militantes de la agrupación Marcha Guevarista del Pueblo y Correpi de la Facultad de Trabajo Social de la UNLP. El puntapié que desató una catarata de voces después fue la denuncia pública que hizo una estudiante. Terminaron siendo 50 las víctimas en total.
"No será sencillo lo que vamos a decir, no será sencillo leerlo, tampoco escribirlo y mucho menos ponerlo en palabras. Pero apostamos a la verdad, para liberarnos", arrancaba el comunicado en el perfil de Facebook “Las Pibas No Nos Callamos Más”, que llevaba la firma de medio centenar de mujeres y exponía, con nombre y con foto, a los presuntos responsables de los abusos.
La denuncia se viralizó en las redes sociales y fueron varias las consecuencias del impacto. En las últimas horas la abogada María del Carmen Verdú sostuvo que el militante vinculado a Correpi que fue señalado como abusador ya fue expulsado de la organización y manifestó además su apoyo a las denunciantes. "Fue un acto de valentía lo que hicieron", expresó.
También se hicieron eco las organizaciones estudiantiles de todas las facultades de la UNLP y a través de un comunicado, los funcionarios de Trabajo Social sumaron su solidaridad con ellas. Este viernes a partir de las 16 se hará una "jornada de mística" y "una mesa de escrache" en esa sede de la Facultad y marcharán a partir de las 17.30 a las puertas del rectorado bajo el lema "Basta de violencia machista".