Dictaron la prisión preventiva con arresto domiciliario para el cuñado de Gastón Bustamante, acusado de ser el autor del asesinato del nene de 12 años, el pasado 21 de noviembre. A mediados de diciembre, el fiscal Rodolfo Moure le había pedido la preventiva a la jueza de garantías Rosa Frende.
Ramón es estudiante de derecho y el novio de Rocío, la hermana de la víctima. En un principio, la joven, junto a la familia del imputado, reclamó que su pareja era un “perejil” de la Justicia. De todas formas, luego lo complicó cuando aseguró que no lo vio tocar el televisor como él había dicho. Su abogado dijo que cumplirá prisión domiciliaria con control de pulsera magnética en Mar del Plata. Los padres de Gastón tienen cinco días para apelar la prisión domiciliaria.
El fiscal detectó las huellas de Ramón en un televisor de la casa. Este indicio llevó a los investigadores a pensar en la simulación de un robo para ocultar el homicidio. Esta es la principal prueba por la que Moure mantuvo la imputación. Sostuvo, durante el pedido de la preventiva, era "una huella arrastrada, como si se levantara el televisor".
El fiscal estimó que el joven pudo haber matado al niño "por ambición" e interpretó que posiblemente entró a la casa de los Bustamante cuando el nene estaba solo en busca de un "dinero del cual conocía su existencia".
La defensa del estudiante de 24 años, a cargo del letrado Alejandro Borawski, había solicitado que dejen en libertad a su cliente por "falta de mérito". Ahora el particular damnificado, los padres del niño asesinado junto a la abogada que los representa, Adelina Martorella, tendrán cinco días para apelar la resolución de la jueza para que quede efectivo el arresto domiciliario.
