En las últimas horas fueron detenidas 15 personas acusadas de participar de una organización criminal que reclutaba a travestis en el norte del país para luego obligarlas a realizarse cirugías estéticas. Una vez que las explotaban sexualmente en la Capital Federal, las enviaban a prostituirse a Francia e Italia.
A raíz de una denuncia de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas, el Juez Sebastián Casanello y el fiscal Ramiro Gonzalez comenzaron a investigar la causa en el 2015. Incluso hubo un seguimiento del caso en Francia por el cual varios argentinos terminaron detenidos.
La banda se dedicaba a captar travestis y transexuales con promesas de una vida mejor en Tucumán, Salta, Jujuy y Chaco. Les ofrecían trabajo y las trasladaban a la Capital Federal, donde vivían en el Hotel Gondolini, ubicado sobre la calle Aráoz 924. Allí les cobraban luz, gas, agua y les exigían 4 mil pesos por cama. Varias de las denuncias de las víctimas señalaron que en ese lugar sufrieron numerosos castigos físicos.
También, los detenidos les prestaban el dinero inicial para las operaciones de prótesis, pero les pedían que les devuelvan el doble. El médico cirujano que las intervenía fue Alfredo Carande en su clínica en la Ciudad de Santa Fe. Ayer al mediodía fue detenido en uno de los 15 allanamientos ordenados por Casanello. Según se explicó, el médico les inyectaba aceite de avión llamado "silicon".
Además de la clínica de Carande, los investigadores registraron una agencia de viajes ubicada en plena calle Florida de la Ciudad de Buenos Aires. El establecimiento está sospechado de falsificar la documentación para que las víctimas puedan volar a Europa.
Una de los detenidas por la causa es la transexual Andrea Desiderio Aldonate, apodada "La Chichi". La acusada estuvo a cargo del Hotel Gondolini entre el 2008 y 2013, y había cumplido una condena en Francia por el delito de trata de personas.
La organización actuaba en distintas partes del norte del país. En Jujuy la captación la hacían un grupo de tres hermanas transexuales de apellido Serapio, apodadas "las trillizas". En Chaco, la banda estaba a cargo de Daniel Walter Martínez, alias "la tía Chichi". En Salta, la seducción de las futuras víctimas estaba en las manos de la transexual Marcela de los Ángeles Viñabal. Por último, en Tucumán, la hacían las transexuales María Luisa Villarreal y Luisa Micaela Mansilla.
