"¿Me regalas tu cuerpito?". La pregunta se la hizo su hija de 3 años y fue entonces cuando a la mujer se le prendió la primera luz de alerta. Después siguieron las noches sin dormir con pesadillas, las quejas por dolores en sus partes íntimas, hasta que llegó la confesión. Su papá abusaba de ella cuando iba a verlo a su casa y así, empezó el calvario de la madre.
Su relación de pareja con el padre de la nena terminó hace un año. Después de soportar un tiempo de maltratos y amenazas, un día decidió separarse. En ese momento, según publicó el diario Crónica, el hombre intentó retener a la menor y evitar que su mamá la viera. Ella lo denunció y la Justicia le dio la razón.
La menor volvió a la casa materna, pero nada impidió que tuviera que seguir vinculándose con su papá. Fue después de esas visitas que empezaron las preguntas, los dolores y en medio de llantos interminables los detalles que ninguna madre querría escuchar.
La mujer volvió a denunciarlo. Ahora por violencia y por presunto abuso ante la fiscalía de General Rodríguez, a cargo de Alejandra Rodríguez. Hasta el momento la respuesta que obtuvo fue que no hay pruebas suficientes como para evitar esos encuentros, aunque la criatura sufra ataques de pánico y no quiera verlo.
