Este miércoles se realizó la primera audiencia de cesura en el tramo final del juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski después del veredicto del jurado popular, que declaró culpables a los miembros del clan Sena.
En el comienzo del proceso, las defensas de los acusados le pidieron a la jueza Dolly Roxana Fernández la nulidad del veredicto argumentando que el jurado no fue imparcial. El abogado de la familia de la víctima y la fiscalía se opusieron a este reclamo.
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Emerenciano Sena no se presentó en la sala y argumentó problemas de salud. César Sena sí participó, aunque sin su abogada, que siguió el procedimiento por videollamada. Marcela Acuña, por su parte, estuvo presente junto a su defensora.
La primera en hablar de la nulidad del veredicto fue Celeste Segovia, quien lleva adelante la defensa de César Sena. En su planteo, argumentó que no hubo imparcialidad por parte del jurado. “Fue un proceso signado por vicios, exposición mediática descontrolada y una serie de irregularidades que fue viciando la imparcialidad del jurado”, expresó y sumó: “Un juicio contaminado no puede producir una sentencia válida”.
También habló de una “estigmatización de los acusados” que afectó las “garantías procesales”. “El entorno era incompatible con un juicio justo”, resaltó. Al pedido de Segovia también se sumaron los abogados de Emerenciano Sena y Marcela Acuña.
Luego de un cuarto intermedio, hubo un planteo por parte de Segovia, quien solicitó que una vez que se conozcan las penas, se realice una junta médica que analice el estado de salud de los acusados para una posible prisión domiciliaria.
El fiscal Martín Bogado lo cuestionó: “Cualquier ataque o cuestionamiento al proceso de deliberación no es materia de ser incubado aquí, en esta audiencia de cesura. Esto debe ser rechazado. Eso de saber dónde el jurado estaba alojado, la verdad es que no sé cómo saben ellos, los defensores, el lugar donde estaba alojado el jurado y que personas del Poder Ejecutivo fueron a presionarlos. Es una denuncia muy grave y tendrán que acompañarla con las pruebas pertinentes”.
“Lo que no pudieron hacer es convencer al jurado, y ahora vienen con estos planteos tratando de poner un manto de duda o sospecha para lograr conmoción. No tienen pruebas concretas de lo que dicen”, completó.
Sobre el final, además, las defensas reclamaron que se investiguen las declaraciones de Gloria Romero, madre de Cecilia Strzyzowski, y de Ronan Amarilla, amigo de la joven.
El proceso continuará este jueves desde las 9:00 y podría extenderse hasta el viernes. Allí continuarán presentando los argumentos de las partes para establecer las penas.
La audiencia de cesura en la etapa final
La audiencia de cesura es una instancia técnica pero determinante, donde se definirá qué penas recibirán cada uno de los condenados, entre ellos César Sena y a sus padres, Emerenciano Sena y Marcela Acuña, y sus colaboradores.
La definición quedará en manos de la jueza Dolly Roxana Fernández, que escuchará a las partes antes de fijar las sentencias. La expectativa está puesta especialmente en los tres miembros principales del clan piquetero.
Fuentes de la investigación remarcaron que, por el delito por el que fueron declarados culpables (homicidio doblemente agravado por el vínculo y por violencia de género), la ley prevé una sola pena posible: prisión perpetua.

Fiscalía, querellas y defensas podrán presentar pruebas adicionales, discutir agravantes y atenuantes y fundamentar los pedidos de pena. “Cada parte expone por qué considera justa una determinada sanción”, explicaron en el Ministerio Público en una conferencia de prensa.
En paralelo a la situación del clan, la cesura también alcanzará a los tres colaboradores que participaron del encubrimiento del femicidio. Ellos son Fabiana González, Gustavo Obregón y Gustavo Melgarejo. Sus casos serán el foco de mayor discusión, ya que las defensas intentarán diferenciar roles y reclamar reducciones de pena según el grado de participación. Incluso Melgarejo, que llegó a esta instancia en libertad tras el veredicto, deberá recibir su condena definitiva.
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La causa llega a esta etapa casi dos años y medio después de la desaparición de Cecilia, cuyo rastro se reconstruyó a partir de elementos clave hallados carbonizados en un campo de los Sena, junto al río Tragadero.
Estos indicios reunidos durante la investigación fueron determinantes para acreditar que Cecilia ingresó con vida a la casa familiar en Resistencia y que nunca salió por sus propios medios.

En las últimas semanas, integrantes del equipo fiscal insistieron en que esta fase no revisa la culpabilidad, que ya fue establecida por el jurado, sino que fija la respuesta penal del Estado.
Tras la cesura, todas las partes tendrán la posibilidad de apelar la sentencia ante instancias superiores, por lo que se prevé que el caso siga su recorrido judicial durante los próximos meses.



