Después de pasar seis meses con tobillera electrónica y arresto domiciliario en su casa de Salta, la Justicia liberó a Héctor Romero, el camionero que - según la investigación - fue la última persona que vio a María Cash, la joven que se encuentra desaparecida desde el 8 de julio de 2011.
“Recibimos la noticia con sorpresa y mucha alegría por lo que decidió la Justicia”, dijo a Clarín Oscar Romero, uno de los ocho hermanos de Héctor. Al mismo tiempo, pidió que se “sepa la verdad” de lo que pasó con la joven diseñadora.
Leé también: La familia de María Cash apuntó al camionero acusado de haberla matado: “Nunca se declaró inocente”
Los meses de encierro
La familia de Héctor Romero siempre tuvo la seguridad de que el camionero “es inocente”. “Hicimos una marcha de silencio en diciembre y nos acompañó la gente de Güemes. Después no quisimos hacer más porque queríamos dejar que la justicia trabaje tranquila, sin presiones, para que esto no se vaya por otro carril”, relató Oscar.
Tras el sobreseimiento, Héctor no hizo aún declaraciones públicas. “Él es muy de perfil bajo, no se quiere exponer, así que no quiere aparecer”, sostuvo su hermano. Y resaltó: “Bastante lo han expuesto con esas fotos detenido por todos lados”.
De acuerdo con su testimonio, durante los meses de encierro el camionero sufrió un “daño psicológico, físico y emocional, el daño económico fue tremendo”. “Mi hermano y todos en la familia tuvimos que sacar dinero de donde no había para pagar la defensa de la causa. Y, si bien en Güemes recibimos mucho apoyo, las redes sociales no perdonan:tuvimos que aguantar de todo", señaló Oscar.
Y completó: “Recibimos castigos, improperios y uno se lo tiene que bancar y seguir para adelante. Le va a costar mucho seguir con su vida porque las manchas que le propiciaron va a costar sacárselas”.
Mientras la fiscalía ya anticipó que apelará el fallo, el abogado del camionero, Fernando Díaz, explicó que el expediente por la desaparición de María Cash tiene 420 fojas y que la investigación fue exhaustiva.
“Se logró determinar que Romero no tenía ninguna implicancia en lo que pasó con María Cash”, aseguró Díaz.
Giro en el caso: la familia Crespín bajo la lupa
Con Romero fuera del expediente, la investigación se enfoca ahora en la zona donde él aseguró haber dejado a María Cash, cerca del paraje Difunta Correa. Allí, una gomería y un comedor de la familia Crespín nunca fueron completamente descartados en la causa.

La jueza Giménez recordó contradicciones en los testimonios de Ramón Venerando y Ramón Alejandro Crespín. En 2017, un perro rastreador marcó varias veces un basurero metálico de 200 litros en esa propiedad, aunque los rastrillajes no encontraron restos humanos.
Leé también: La Justicia sobreseyó al camionero que estaba acusado de matar a María Cash
Si María bajó en ese lugar deshabitado, lo lógico es que buscara ayuda en la casa de los Crespín. Sin embargo, padre e hijo dieron versiones diferentes sobre quién estaba en el lugar ese día y negaron haberla visto.

Para la magistrada, estas inconsistencias merecen “especial atención” y podrían reactivar una línea investigativa que el Cuerpo de Investigaciones Fiscales descartó sin fundamentar.
En tanto, la familia de la diseñadora desaparecida recibió con indignación la resolución judicial que dejó en libertad al principal sospechoso que, hasta ahora, tuvo el caso.
“Solo quiero mencionar la mediocridad de la Justicia argentina, pero eso no es ninguna novedad”, manifestó Santiago Cash, uno de los hermanos de María, en diálogo con TN.