Juan Pablo Majo, el hombre que en 2015 había sido condenado a 11 años de prisión por 12 asaltos a comercios, quedó libre y volvió a robar. En las últimas horas, la Policía de la Ciudad lo detuvo en Las Cañitas por dos violentos hechos ocurridos en los barrios de Palermo y Belgrano.
El último golpe del delincuente, también conocido como “el Tarántula”, fue en un local de ropa ubicado sobre a calle Gorostiaga al 1500, donde irrumpió y, sin mediar palabra, tomó violentamente del pelo a una clienta que se encontraba en el lugar e intentó después abrir la caja registradora para llevarse la recaudación.
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Tras forcejear durante algunos minutos sin lograr su objetivo, el ladrón se dio a la fuga pero fue detenido a unas tres cuadras del negocio, en Maure al 1700. Fue entonces cuando constataron que se trataba del mismo hombre al que buscaban por un robo a una peluquería ocurrido en el mes de abril.
El mismo modus operandi
La declaración de la dueña de la peluquería asaltada días atrás por Majo, ubicada sobre la calle Cuba al 1800 del barrio de Belgrano, dejó en evidencia el modus operandi del delincuente, casi calcado en ambos casos.

La peluquera sostuvo que el acusado ingresó a su local, la sujetó por el cabello y, después de arrastrarla por todo el comercio, la encerró en el baño y escapó con 500 mil pesos y un teléfono celular.
Los dos robos fueron registrados por cámaras de seguridad privadas y los videos fueron incorporados como prueba a la causa.
Por el último hecho, el detenido quedó a disposición de la Justicia por tentativa de robo, con intervención del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 6 a cargo de la Dra. Provítola.
Un historial de violencia
En septiembre de 2015, “el Tarántula” fue condenado a 11 años de cárcel por 12 robos violentos que protagonizó en comercios de San Isidro y Martínez. En todos los casos, que ocurrieron entre el 1 y el 27 de diciembre de 2014, el hombre golpeó a las vendedoras.
En el juicio se pudo probar que Majo tenía siempre el mismo modus operandi: elegía comercios atendidos sólo por mujeres donde irrumpía a los gritos y le pegaba a alguna vendedora para generar temor en el resto.
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“Si me paro te rompo la nariz a trompadas”, dijo “el Tarántula” en la primera audiencia del debate. La amenaza iba dirigida al fiscal de San Isidro Patricio Ferrari, pero no consiguió amedrentarlo.
En su alegato final, Ferrari pidió que se lo condenara a 19 años y dos meses de prisión y argumentó que, al momento de ser detenido, Majo se encontraba en libertad asistida por otra condena que todavía cumplía.