Un hombre de 35 años fue asesinado a ladrillazos por su amante, quien al ser detenida le dijo a la Policía que lo atacó porque él la mantenía cautiva.
El brutal episodio ocurrió durante la noche del domingo en cercanías a la localidad de Pozo del Toba, en Santiago del Estero.
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La víctima fue identificada como Ernesto Darío Aranda, un peón de 35 años que fue hallado por su sobrina dentro de su casa y con graves heridas en la cabeza.
En el mismo lugar y a pocos metros del cuerpo estaba la sospechosa, María Isabel Carrizo, de 29 años, a quien la sobrina le reclamó no haberle avisado lo sucedido. En ese momento la acusada se defendió y dijo que lo había agredido porque Aranda no le permitía salir del lugar.
La sobrina de hombre enseguida le avisó a otros familiares y rápidamente lo trasladaron hasta el Puesto Sanitario de la zona. Tras ello, fue derivado al Centro Integral de Salud Banda.
Sin embargo, pese a los esfuerzos médicos, el peón murió este lunes por la mañana. Luego de que se conociera la noticia del fatal desenlace, la fiscal de turno, Celia Mussi, solicitó una autopsia y ordenó participación de los integrantes de la División Homicidios de La Banda.
Hasta el momento, la reconstrucción que realizaron los peritos sostiene que durante la noche del sábado y madrugada del domingo Aranda estuvo acompañado por Carrizo, quien le confesó a los investigadores que era amante del hombre.
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“El sábado a la noche me encontré con Ernesto en Quimilí, sin que mi pareja lo supiera”, detalló. “Fuimos hasta el rancho de él en Pozo del Toba. Tras varias horas, no me dejaba salir de la casa para regresar a mi vivienda. Yo salí de mi casa diciendo que iba a pasear y ya debía regresar”, agregó.
Según su relato, el hombre estaba sentado cuando en un descuido ella lo golpeó con un ladrillo en la cabeza.
Sumado a ello, el marido de la mujer fue trasladado por los investigadores a la dependencia policial debido a que su pareja lo mencionó en varias oportunidades tratando de incriminarlo en el homicidio. Sin embargo, aún no hay indicios que señalen que el hombre haya estado en el lugar. Ante este panorama, Carrizo fue detenida.
En medio de la investigación, los policías también intentan identificar a un hombre que transitaba a bordo de una moto de color gris y que le robó la billetera y el teléfono celular a Aranda cuando estaba tirado e inconsciente