Este miércoles, los repartidores de La Matanza recuperaron otra moto robada tras ir en caravana hasta el barrio donde los delincuentes la tenían escondida.
En esta oportunidad, los deliverys se dirigieron hasta la intersección de las calles Almirante Brown y Pagola, en Las Antenas, un asentamiento ubicado en la localidad de Lomas del Mirador.
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Toda la secuencia quedó registrada por los propios trabajadores que capturaron el momento en el que uno de ellos llegaba con el vehículo robado. “Guarda que vinimos a recuperar la moto, mirá que somos más, faltan más todavía”, gritó un joven.
“Dale que la recuperamos”, sumó otro, mientras que al ver la moto uno añadió: “Las ratas se quedaron con las ganas”.
La secuencia muestra al grupo de repartidores esperando en la esquina hasta que uno de ellos apareció en escena con la moto recuperada. Después todos juntos, en caravana, se retiraron del lugar.
Según precisaron los propios deliverys, el repartidor asaltado había recibido un pedido por $50.000 cuya dirección de entrega era el barrio Las Antenas.
Sin embargo, el pedido era falso. “Cuando se acerca a la dirección ve que hay dos tipos parados en una esquina. Se queda sobre Almirante Brown, antes de la esquina. Da aviso al grupo de WhatsApp, antes de que le vinieran a robar, de que el pedido era falso, para ver si lo podíamos segundear. Por el espejito ve que vienen corriendo los dos y se suman cuatro más. Lo bajan de la moto queriéndolo apuñalar, él manotea y termina sacándoles el cuchillo”, contó a Clarín uno de sus compañeros.
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Según precisó, al bajarlo de la moto, el celular quedó adentro de su casco y no pudieron sacárselo. En ese momento los ladrones le dispararon cuatro veces, pero afortunadamente en ninguna de esas oportunidades sufrió heridas.
Con su teléfono en la mano, la víctima comenzó a pedir ayuda a sus compañeros. Tras ello, llamó a la Policía que enseguida se acercó a la zona con un patrullero y todos empezaron a organizarse para ir a buscar el vehículo.
En grupo, finalmente, el chico asaltado y otros deliverys ingresaron al asentamiento y luego de una disputa con los delincuentes, lograron recuperar la moto.
Este accionar colectivo se suma al del sábado. En aquel momento, otro repartidor fue asaltado mientras entregaba un pedido. Enseguida le avisó a sus compañeros lo que había pasado y ellos, cansados de la inseguridad y en caravana, fueron a recuperarla hasta la villa Santos Vega de San Justo.
