La muerte de Aralí Vivas, la nena de ocho años que fue asesinada el pasado fin de semana en la localidad de Brinkmann, generó una gran conmoción en Córdoba y un profundo dolor en su familia. Precisamente su tía la recordó como “una niña llena de luz y alegría, con mucha vitalidad. Ella era amorosa, muy amorosa”.
Nazarena Rauch, hermana de la mamá de Aralí (detenida en las últimas horas por el asesinato de su hija), contó que estaba con ella en Morteros cuando les avisaron que debían viajar de urgencia a Brinkmann “por una desgracia”. “Nunca imaginé lo que había pasado”, dijo la mujer.
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Rocío Milagros Rauch (28) quedó imputada por el delito de “homicidio calificado por el vínculo en calidad de partícipe necesario”, según informaron fuentes oficiales a La Voz del Interior.
Nazarena, en diálogo con Arriba Córdoba, relató que su hermana estaba con ella “porque había venido a reclamar la cuota alimentaria del padre de Aralí. No le pedía dinero a él sino el dinero que le daba el Gobierno y él se quedaba”.
Nazarena pidió justicia por su sobrina y que los responsables “no vuelvan a ver la luz del sol” y “que paguen los que tengan que pagar”.
Si bien negó que su hermana ejerciera violencia física contra la menor asesinada, luego indicó: “Una madre no tendría que haber dejado a su niña con una persona con los antecedentes que tenía”.
En cuanto a quién era Aralí, Nazarena narró: “Cuando iba a verla a Brinkmann venía corriendo y me abrazaba, así era con todos. Iba a la escuelita de fútbol de Las Ranitas de Brinkmann, que también tiene merenderos en la zona. A pesar de todo, Aralí siempre estaba con una sonrisa en la cara. Amaba a sus hermanos, se hacía cargo de sus hermanitos, y también amaba mucho a su mamá”.
Así fue el crimen que horrorizó Córdoba
El caso que conmovió a la localidad de Brinkmann, en Córdoba, ocurrió el sábado por la tarde. La Policía detuvo al padrastro de la nena, que ya contaba con antecedentes por violencia de género, y a un amigo de él.
Los datos preliminares de la autopsia al cuerpo de la nena indicaron que no había encontrado monóxido de carbono en su organismo. “El cuerpo forense halló un traumatismo en la zona craneal, pero falta indagar más. Resta un estudio forense pormenorizado y con estudios complementarios. Lo que sí está claro es que esa criatura no murió ni intoxicada por el monóxido ni por el incendio”, explicó una fuente a La Voz.
Este lunes dieron a conocer nuevos datos sobre la autopsia. Mario Vignollo, perito a cargo del procedimiento, calificó al hecho como “aberrante” y brindó escalofriantes detalles al respecto. Además, señaló que “es imposible ver la causa de muerte a simple vista” por el deterioro del cadáver, ya que “estaba carbonizado y en parte calcinado”.
Si bien le realizarán estudios complementarios, el perito confirmó en diálogo con el portal Bueno Días Región que la víctima murió antes del incendio. “Cuando la casa se quemó, ya estaba muerta”, puntualizó.
Previo a la detención de la madre de Aralí, el fiscal Gieco ordenó que tanto el padrastro de la nena, identificado como Matías Ezequiel Simeone (33), y un amigo de él, llamado Cristian Hernán Varela (40), fueran detenidos. Además de estos arrestos, se sumó el de la madre de la víctima este lunes. Las pericias sostienen que el incendio en la casa fue provocado de manera intencional para desviar la investigación.