La noche del 16 de diciembre, Tatiana Ruiz celebró su cumpleaños en la casa de sus suegros y salió a bailar con su novio, Lucas Feijoo, por el barrio porteño de Flores. Una discusión en el auto derivó en un brutal ataque de su pareja, que la atropelló cuando intentaba volver a subir. Feijoo le mintió a la policía diciendo que había encontrado a su novia muerta, pero en realidad la joven estaba viva y pasó varios meses en coma.
A diez meses de aquel ataque, Tatiana sigue internada en el hospital Fleni de la localidad bonaerense de Escobar. No puede comer por sus propios medios —es alimentada a través de una sonda— y apenas puede decirle algunas palabras a su familia. La situación de su expareja es completamente distinta.
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Lucas Feijoo quedó detenido unos minutos después de haber atropellado a su novia, pero con el pasar de los días su situación judicial cambió favorablemente. La Justicia determinó que la carátula del caso debía ser “lesiones culposas” y le dio prisión domiciliaria. Desde entonces, se mantiene en su casa con tobillera electrónica.
“Viven de joda constantemente en esa casa, yo paso cada dos por tres y siempre están de joda. El sábado pasado fue el cumpleaños de este pibe y llenó la casa de gente”, dijo a TN Ricardo Ruiz, padre de la víctima, sobre su exyerno. “Ni el padre ni la madre de él se acercaron para saber cómo está todo”, agregó.
La bronca de la familia de Tatiana se percibe cuando comparan cómo vive la joven y cómo se encuentra Lucas. Mientras los Ruiz deben hacer un esquema familiar para no dejar sola a Ruiz, el hombre que casi la mata está en su casa desde hace más de 9 meses.
Ricardo Ruiz aseguró a este medio que judicialmente tratarán de avanzar para que permanezca detenido en alguna dependencia policial: “Queremos que esté en la comisaría, no en la casa. A mí me pudre todo esto, las vueltas que dan y las chicanas que te hacen. Tiene que ser todo más expeditivo”.
Martín Filipponi, abogado de la familia de la víctima, explicó que es poco probable que el agresor pase a estar detenido en un penal: “Va a llegar con prisión domiciliaria al juicio porque el juez entendió que se trataba de lesiones culposas y no había riesgo de fuga, a pesar de que tiene los medios económicos para hacerlo”.
Filipponi explicó que el juez caratuló la causa en un principio como lesiones culposas porque “no consideraba que el acusado hubiera obrado con intención”. En ese contexto, aclaró que todavía no estaban constituidos como querellantes y que quien debía apelar la decisión de la prisión domiciliaria era la fiscal.
En ese sentido, reconoció que la prisión domiciliaria se mantendrá porque “no se agravó el tema”.
La salud de Tatiana Ruiz: no come por sus propios medios, apenas puede hablar y no recuerda el ataque
El padre de Tatiana Ruiz contó que su hija está internada en el hospital Fleni desde marzo de este año. Reconoció que mejoró su estado de salud, pero aclaró que continúa sin poder comer por sus propios medios y que solo puede hablar a través de una válvula.
“Está mucho mejor de lo que estaba, te conoce y te quiere hablar. Pero sigue complicada porque no come por sus propios medios, está con una sonda nasogástrica y sigue entubada y con traqueotomía. Todos los músculos de la tráquea los tiene muy debilitados”, explicó Ricardo Ruiz.
También señaló que Tatiana comenzó a caminar de a poco y que mantiene un esquema intenso de terapias: “Desde las 9 de la mañana hasta las 7 de la tarde hace terapia. Nosotros estamos todos los días ahí porque tenemos que llevarla a cada lugar”.
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Ruiz reveló que su hija ya puede hablar un poco a través de una válvula. “No tenemos un diálogo fluido. Apenas le preguntamos cómo le fue en las terapias y cómo se siente. Pero escuchar su voz después de tanto tiempo me emociona. Antes tenía que poner los mensajes de voz viejos para escucharla, una locura”.
En ese contexto, descubrieron que no recuerda los años de relación que mantuvo con Lucas Feijo: “Nunca preguntó por él, es como que estos cuatro años los tiene bloqueados. Es como una autodefensa que tiene en la cabeza”.
“No preguntó por Lucas, no sabe lo que pasó con la camioneta. Pero en algún momento se va a acordar y por el carácter que tenía no se la va a bancar cuando se entere”, señaló.
En ese sentido, agregó: “Cuando explote todo, los psicólogos y los psiquiatras lo van a tener que tratar. A la larga se va a enterar y uno no sabe cómo va a reaccionar con esas cosas. Una vez que ella sepa el tiempo que pasó y como fue que le pasó, se va a poner mal”.
La pericia del celular que puede ser clave para el avance de la causa
La investigación judicial por el ataque que sufrió Tatiana Ruiz avanza lentamente. A principio de año surgieron nuevos videos con detalles del hecho y ahora se esperan las pericias al celular de la víctima, donde habría un chat que mostraría un antecedente de violencia.
Martín Filipponi, abogado de la familia de la joven, detalló que el juez correccional pidió que se avance con la pericia, pero que la defensa de Feijoo se opuso: “Plantean que se pudo haber manipulado el chip con el tiempo que pasó”.
“¿Qué voy a manipular si no sé ni prender el celular?”, dijo Ricardo Ruiz sobre los argumentos presentados por la defensa del empresario de 27 años. En ese contexto, Filipponi agrego: “Yo creo que el celular va a demostrar que ya hay antecedentes de violencia de género”.
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Fuentes vinculadas a la causa le aseguraron a TN que habría un antecedente muy similar al ataque que sufrió Tatiana Ruiz y que estaría documentado en el celular de la joven. Aparentemente, el agresor ya la habría golpeado con la puerta del auto y en ese momento le quedó un moretón en su brazo.
De cara a la elevación a juicio, Filipponi planteó que deberán ponerse de acuerdo con la fiscalía: “Yo sostengo que hay dolo eventual porque a Feijoo se le representa lo que podía pasar y decidió avanzar igual”.
“Tenemos elementos para que sea condenado. Va a ser responsable por las lesiones culposas, por la gravedad de la lesión que tiene Tatiana y la pericia confirmó que el tuvo que haber escuchado los gritos cuando Tatiana golpeaba la puerta. Él la escuchó, no le importó y arrancó igual. Sabía lo que podía pasar y no le importó”, cerró el abogado.
