Un joven de 23 años murió y otros dos hombres resultaron heridos en medio de un feroz tiroteo que se desató tras un enfrentamiento entre dos grupos de recicladores en un basural de Mar del Plata. Un policía quedó detenido por el hecho.
El asesinato ocurrió el viernes por la tarde cuando dos grupos de personas que se dedican a reciclar basura se enfrentaron por la carga de un camión. Uno de los dos grupos anticipó al otro y ahí se desencadenó una acalorada discusión que en cuestión de minutos pasó a ser una pelea.
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Las imágenes filmadas por el celular de una de las personas que estaban en el predio son claras: decenas de trabajadores se enfrentaron a golpes, se arrojaron piedras e incluso se pegaron con palos para adueñarse de la carga. En el video se ve como uno de los recicladores tiene sangre en su cara por haber recibido una piña.
Dos policías que estaban en ese sector del predio intervinieron para tratar de calmar los ánimos, pero también fueron agredidos por las personas que protagonizaban la pelea. En el medio de los golpes y los empujones, uno de los agentes denunció que perdió su arma reglamentaria.
Unos pocos minutos después llegaron al lugar otros dos agentes que estaban en un puesto fijo de la Policía Bonaerense ubicado en el acceso al basural. Esos dos oficiales también fueron agredidos con palos y desde la puerta del puesto uno de los efectivos comenzó a disparar.
Una de esas balas impactó en la cabeza de Emanuel Márquez, un joven de 23 años que trabajaba como reciclador. El joven quedó tendido boca arriba con la cabeza apoyada contra el paragolpe de un auto que estaba estacionado cerca del puesto policial.
En un primer momento se dijo que los propios recicladores habían asesinado a Márquez con el arma reglamentaria que le habían robado a uno de los policías, sin embargo, uno de los videos desmiente esa verisón.
Unas horas más tardes se difundió la grabación en la que el joven de 23 años es llevado al hospital por los propios recicladores. La víctima fue cubierta con una frazada y trasladada en una camioneta Ford F100 hasta el Hospital Interzonal de Mar del Plata, donde se confirmó el fallecimiento.
En ese mismo vehículo iban otros dos hombres heridos de bala que todavía están internados. El primero es Fernando Márquez, el hermano de la víctima fatal que tiene 27 años. El otro es Lautaro Olivera, un joven de 25 años.
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Dos agentes de la Policía Bonerense también fueron atendidos en ese centro de salud marplatense, pero por heridas leves. Ambos fueron dados de alta unas pocas horas después del brutal tiroteo.
La investigación está a cargo del fiscal Alejandro Pellegrinelli, que ordenó el secuestro de tres de las cuatro armas que tenían los efectivos policiales. El arma que uno de los policías denunció como robada no apareció y un sargento de 30 años fue detenido por el tiroteo.
El intendente Guillermo Montenegro defendió la acción del policía detenido: “Velaba por su seguridad, la de sus compañeros y de todos los marplatenses. Frente a la acción, la respuesta. A eso se enfrentan día a día las fuerzas que nos cuidan”.
