La caja en la que estaba el material radiactivo que fue robado de una empresa de medicina del barrio porteño de Saavedra fue encontrada en el barrio porteño de Chacarita, pero completamente vacía y continúa la búsqueda de la cápsula de plomo.
Pasadas las 21 de este martes, un vecino divisó la caja en un contenedor de basura ubicado entre las calles Charlone y Elcano y llamó al 911. A partir del llamado, se realizó un operativo en conjunto entre la Policía de la Ciudad y la división de residuos peligrosos de la Policía Federal.
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Sin embargo, la inspección realizada por los efectivos policiales dio resultado negativo porque la caja estaba vacía y la cápsula que buscan no estaba adentro del contenedor de basura.
Los agentes de la comisaría vecinal 15C explicaron que la caja era de un material símil cartó de color blanco y que tenía las inscripciones “Radiactivo II”, por lo que coincidía con los elementos sustraídos durante la mañana del martes en Saavedra.
Además, quienes estuvieron a cargo del operativo detallaron que la caja estaba abierta, pero no se lograba visualizar el contenido que estaba dentro porque estaba cubierta de papeles en su interior.
El dato que puede ser clave para el avance en la investigación es que se encontró radiación de bajo nivel dentro del contenedor, por lo que se realizaron trabajos de limpieza en el mismo.
El hallazgo de la caja, sumado a la confirmación de los niveles de radiación y a las cámaras de seguridad de la zona podrían generar que los investigadores puedan dar con la persona que deshechó la caja en el contenedor de basura.
Mientras tanto, la Fiscalía de Instrucción de Distrito de los Barrios de Saavedra y Núñez, a cargo de José María Campagnoli, continúa con la búsqueda del material radiactivo que es altamente peligroso.
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La denuncia de la desaparición o hurto del material nuclear fue realizada por el chofer de una empresa de insumos médicos de Saavedra, Tecnonuclear, que debía transportarlo y que notó el faltante de la caja cuando estaba cargando su vehículo, alrededor de las 5.30, una camioneta Citroën Berlingo.
Según precisó la empresa, situada en la calle Arias al 4.100, se trataba de un bulto “Tipo A” que contenía “una fuente de “Iodo 131″ (I-131) utilizado en medicina nuclear, con una actividad de 40 mCi al momento del hurto y con una tasa de dosis de radiación estimada en contacto de 800 mSv/h”.
El contacto con esta sustancia puede producir efectos como vómitos, mareos, quemaduras y que al ser poca cantidad no sería letal. Por su parte, el vecino que manipuló el paquete fue aislado inmediatamente.
