Matías Alejandro Guiñazu mató a su pareja, Soledad Ibañez, de 25 puñaladas en su casa de Merlo. Alertados por los gritos, los vecinos llamaron a la policía, quienes al llegar al lugar vieron la terrorífica escena: el femicida sostenía en sus brazos a su pareja totalmente ensangrentada y al ver a los efectivos amenazó con quitarse la vida.
Casi un mes y medio antes de cometer el crimen, había publicado un peculiar posteo. “Y no m keda otra ja ja ... Busco una compañera para la vida q m resta ... para más información al privado solo es cuestión de intentarlo”, escribió.
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El hecho ocurrió este miércoles en José Martí al 500, en la localidad de Merlo. Los vecinos al escuchar gritos alertaron a la policía y cuando llegaron al lugar vieron a Guiñazu sosteniendo en sus brazos a su novia asesinada de 25 puñaladas.
Al ver a los efectivos, el hombre intentó quitarse la vida. “¿Tirame, qué esperás? Matame de una vez”, provocaba el femicida a los agentes que irrumpieron en su domicilio. Pero no les dio tiempo a reaccionar y se acuchilló a sí mismo frente a todos ellos con el arma blanca que unos minutos había usado para asesinar a su mujer.
Los policías dispararon con postas de goma y armas de estruendo para disuadirlo, según detalló el portal local SM Noticias. Finalmente, lograron reducirlo y lo trasladaron bajo custodia al hospital Héroes de Malvinas, donde permanece internado con pronóstico reservado. Con el correr de las horas, se supo que el agresor tenía antecedentes por violencia de género.
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En tanto, la investigación por el femicidio de Soledad Ibañez recayó en la UFIyJ Nº 12 de Morón, a cargo de María Laura Cristini y Hernán Moyano, Matías Alejandro Guiñazú, tendrá que enfrentar ahora una causa por Homicidio Agravado por el Vínculo y por mediar la violencia de género, cuya única pena prevista es de prisión perpetua.
En el lugar del crimen se secuestró un cuchillo utilizado en el ataque.
