El informe preliminar de autopsia determinó que Florencia Yturrioz, la nutricionista de 26 años que murió tras asistir a una fiesta electrónica en Mar del Plata, sufrió una insuficiencia respiratoria por intoxicación con drogas.
“Es el dato que tenemos hasta ahora, ad referéndum del resultado final de las pericias. Lo que estamos investigando es cómo tuvo acceso al material estupefaciente”, confirmó una fuente del caso a TN.
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Más allá del protocolo investigativo del expediente, caratulado como averiguación de causales de muerte, las sospechas de la familia de la víctima son compartidas por los detectives en torno a la posibilidad de que alguien le haya colocado drogas en el vaso durante la fiesta.
Las características personales de Yturrioz alientan esa hipótesis: la joven, que además era profesora de educación física, cultivaba una vida sana y daba consejos sobre alimentación y hábitos saludables en su consultorio de la ciudad de La Plata y en su cuenta de Instagram. Su espacio -nutriendohabitos.fy- tenía más de 4000 seguidores.
Tras conocerse el caso, comenzó a circular en diferentes grupos de WhatsApp la versión de que el fin de semana hubo una fiesta en Mar del Plata en la que varios jóvenes resultaron intoxicados tras ingerir un supuesto tipo de droga adulterada. Esto, por el momento, no fue confirmado de manera oficial. Tampoco se determinó aún de qué tipo de droga se trata.
“Insuficiencia respiratoria por ingesta de drogas es lo que tenemos hasta ahora. Estamos esperando el resultado de las pericias químicas. No podemos confirmar ahora si es éxtasis o alguna otra sustancia”, indicó la fuente consultada por este medio.
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“Estamos devastados. No podemos hablar. Recién retornamos a La Plata con el cuerpo de Florencia. Solo pedimos que se investigue qué pasó con ella”, dijo un familiar de la víctima al diario La Capital.
Y agregó: “Queremos que nos den una respuesta. Ella era una persona absolutamente sana, comprometida con la alimentación, muy solidaria. La quería todo el mundo. Estaba desarrollando un trabajo vinculado a la alimentación y el autismo. No podemos creer que esto nos pase a nosotros”.
Una semana atrás, Florencia había viajado a Mar del Plata con cuatro amigas. El sábado 13, en la última noche antes del regreso, fueron a bailar a una fiesta electrónica en el balneario Mute, cerca del Faro de Punta Mogotes.
En un momento de la noche, según declaró una de las amigas, Florencia se separó del grupo. Incluso llegó más tarde y sola al departamento que habían alquilado en la Avenida Colón 1426, en el centro de la ciudad.
Cerca del mediodía, la nutricionista sufrió una descompensación y comenzó a convulsionar. Sus amigas llamaron a una ambulancia que la llevó de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA). Florencia quedó internada con asistencia respiratoria mecánica. Su estado era crítico y, a las 16.40, los médicos confirmaron la muerte.
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Fernando Berlingeri, fiscal a cargo del caso, pidió al Cuerpo Médico Forense de la Policía Científica distintos análisis de laboratorio -complementarios a la autopsia- para saber qué tipo de sustancia pudo haber ingerido Florencia y si -en efecto- eso fue lo que precipitó la muerte. El resultado de los estudios demorará entre siete y 15 días.
Yturrioz se había recibido hace casi dos años como licenciada en Nutrición en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y contaba con estudios de antropometría con certificación ISAK 1 y 2. En paralelo, cursó el profesorado de Educación Física.
