El capo narco peruano Raúl Martín Maylli Rivera, más conocido como “Dumbo”, fue extraditado a la Argentina. El hombre de 42 años fue detenido en octubre en Perú, después de estar casi un año prófugo de la Justicia.
Con un gran operativo de seguridad, este miércoles por la tarde fue trasladado a nuestro país, donde en los próximos meses será juzgado como jefe de una banda dedicada a la venta de drogas que trabajaba las 24 horas y con una gran organización en el barrio Padre Mugica, en Villa Lugano, y también en la 1-11-14.
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“Dumbo” llegó esposado, con un chaleco antibalas y escoltado por personal de Interpol Argentina. Viajó en un avión de la empresa Latam, que arribó pasadas las 18 en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.
Minutos después, el narco criminal fue trasladado a la alcaidía de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal Argentina. El viernes será indagado por el juez federal Julián Ercolini.
El titular del Juzgado N°11 lo imputó por los delitos de “comercio de estupefacientes agravado por haber intervenido tres o más personas organizadas, por la intervención de menores de edad y por haberse cometido en inmediaciones de establecimientos donde se realiza actividades deportivas; organización o financiación de actividades relativas al comercio de estupefacientes, su ingreso al territorio nacional y contrabando; y acopio de armas de fuego y municiones”.
Guardias “24/7″ y alto grado de organización: así actuaba la banda de “Dumbo”
La banda de “Dumbo” estaba integrada por alrededor de 20 personas. Todos ellos tomaron el poder de la comercialización de cocaína dentro de la exvilla 31 y también en la 1-11-14 cuando detuvieron al líder narco Marcos González Estrada.
Los investigadores pudieron comprobar que esta organización tenía dominio territorial en la denominada “Platea 11″ del Complejo Habitacional Padre Carlos Mugica y del asentamiento Bermejo, que está enfrente, todo en el barrio de Villa Lugano, tras ser desplazados del barrio Pedro Ricciardelli.
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Los acusados fraccionaban la droga y guardaban las armas y el dinero en un bunker, mientras que las ventas se hacían principalmente en un pasillo que está cerrado al público, que queda al lado de una cancha sintética de fútbol.
Según informó Télam, la venta se hacía en dos turnos durante las 24 horas, los 7 días de la semana. La banda tenía un “alto grado de organización”, con la participación de los denominados “satélites” y “marcadores” que alertaban a los vendedores sobre el ingreso de policías y personas sospechosas.
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Según el requerimiento de elevación a juicio al que fueron sometidos los integrantes de la banda, “exhibían armas de fuego y hasta hacían disparos al aire para amedrentar a los vecinos” y evitar de esa manera que sean denunciados.
Adermás, explicaron que la organización llevaba un registro en cuadernos de las ventas de cocaína, pasta base y marihuana, los gastos y la asistencia y función que desempeñaba cada miembro.
A principios de septiembre, la Justicia federal condenó a 18 integrantes de la banda que comandaba “Dumbo” y otros dos que eran menores de edad, entre ellos su hijo.
