Dos hombres quedaron detenidos acusados de haber asesinado de un disparo a un mecánico que el martes pasado defendió a un vecino durante un robo en Ituzaingó.
Los allanamientos se realizaron en dos casas de la localidad de Parque San Martín, en el partido de Merlo. De acuerdo a lo que informó la agencia Télam, uno de los arrestados, identificado como Daniel Augusto López, tenía en su vivienda un revólver calibre .38.
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Luego de ser sometida a una prueba, se determinó que se trata del arma utilizada para asesinar a Ariel Charrutte. En tanto, también se secuestraron un buzo y un pantalón que vestía el sospechoso al momento del crimen. Por su parte, el otro de los detenidos será llevado a una rueda de reconocimiento para determinar si estuvo en la escena del hecho.
Las detenciones se realizaron tras las órdenes de la fiscal María Laura Cristini, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 descentralizada de Ituzaingó. Fueron llevadas a cabo por el personal de la comisaría 1ra. del distrito y de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Morón.
La fiscal Cristini indagará a López en las próximas horas y aguardará el resultado del procedimiento del segundo detenido para pedir las detenciones formales.
Así fue el crimen del mecánico en Ituzaingó
El crimen de Charrutte sucedió poco después de las 21 del martes 26 de septiembre en la intersección de las calles Caaguazú 2500, casi esquina Bertole, en Ituzaingó sur.
El hombre estaba en un taller mecánico que comparte con un amigo cuando ambos fueron testigos de cómo dos delincuentes armados le robaban la moto a un kiosquero de la cuadra.
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Según el relato de testigos, los asaltantes no lograron hacer arrancar la Gilera blanca que le habían sustraído al comerciante y comenzaron a llevarla a pie. Esta secuencia quedó grabada por una cámara de seguridad, donde se puede ver al mecánico salir armado para perseguir a los ladrones.
Instantes después, Charrutte y su socio se subieron a su moto Corven Triax y comenzaron a perseguir a los ladrones con la intención de recuperar el vehículo que le habían robado al kiosquero.
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Según las fuentes consultadas por Télam, cuando los asaltantes se dieron cuenta, dejaron tirada la motocicleta robada y se escondieron atrás de un árbol para comenzar a dispararles. Así fue como Charrutte recibió un balazo en la cabeza, a la altura del ojo izquierdo, que lo tumbó y le provocó la muerte en el lugar.
Finalmente, los delincuentes escaparon con la moto Corven Triax de él, que luego abandonaron a cinco cuadras junto a dos camperas. La muerte de la víctima, de acuerdo a lo que indicó la autopsia, fue por un “sangrado intracraneal producido por herida de proyectil de arma de fuego en cráneo”.
