En la noche del 6 de marzo de 2010, 99 cajas de seguridad de la sucursal Congreso del Banco Macro fueron saqueadas y los delincuentes escaparon con más de 30 millones de dólares que nunca fueron recuperados. A 13 años del llamado “Robo del Milenio”, la Justicia absolvió a los tres acusados y el caso quedó impune.
La decisión del Tribunal Oral Criminal 26 recayó sobre el exsubcomisario de la Policía Federal Marcelo Amarilla, su chofer y también policía Omar Mikic, y Rolando Pardo, quien al momento del hecho era encargado del Instituto Argentino de Seguridad e Higiene, edificio lindero desde donde los boqueteros ingresaron a la entidad bancaria.
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Durante el juicio, los fiscales Diana Goral y el auxiliar Marina Narváez habían pedido la pena para todos de ocho años de prisión, pero el juez Carlos Mirat los absolvió y los fundamentos se conocerán el próximo 28 de abril. La acusación contra los policías era la de haber “liberado”la zona para facilitar el golpe de la banda.
Así fue “El robo de Milenio”
El robo ocurrió el sábado 6 de marzo de 2010 alrededor de las 22:00 cuando a través de un boquete la banda accedió a la sucursal de la avenida Callao 262, a pocas cuadras del Congreso de la Nación.
La banda logró desactivar la alarma y a través del agujero que abrieron pudieron ingresar directamente al sector de bóvedas del banco, donde abrieron 256 cajas de seguridad de las cuales saquearon 99, y así se hicieron de un botín calculado en casi 30 millones de dólares entre dinero en efectivo y joyas.
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El robo ocurrió cuatro años después del que se cometió en el Banco Río de Acassuso, denominado el “robo del siglo”, donde también lograron acceder a través de un boquete y forzaron las cajas de seguridad.
“No será el del siglo pero es el del milenio”, fue el mensaje que dejaron escrito los delincuentes al retirarse del Banco Macro, emulando aquel de 2006, en el que antes de huir los delincuentes también dejaron un mensaje escrito de puño y letra. El dinero nunca se recuperó.
