Este miércoles el fiscal Fernando López Villagra solicitó la prisión perpetua para los policías acusados por el crimen de Valentino Blas Correa, el adolescente de 17 años asesinado de un balazo durante un control en la ciudad de Córdoba agosto de 2020.
El debate oral empezó en la sede de los Tribunales de la ciudad de Córdoba el 7 de septiembre del año pasado y en diciembre, después de más de 20 audiencias y la presentación de alrededor de 60 testimonios, por la feria judicial se pasó a un cuarto intermedio hasta el 8 de febrero.
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En la causa que tiene a 13 policías imputados por el asesinato, Villagra pidió que los dos acusados que dispararon al auto Fiat Argo donde viajaba el adolescente reciban la pena máxima.
El juicio a los acusados por el crimen del adolescente continuó este miércoles con el inicio de la etapa de alegatos. La madre de la víctima aseguró que todos los imputados “son responsables” y que espera que sean condenados.
“Como familia estamos con mucha expectativa y ansiedad, con una mezcla de emociones y sensaciones. Pero estamos tranquilos, sabiendo que este es el puntapié inicial de una lucha mucho más grande que estamos llevando a cabo hace rato”, dijo en diálogo con TN Juan Laciar, hermano de Blas.
Según el cronograma establecido, el viernes 24 de febrero será el turno de los letrados querellantes, mientras que del 3 al 17 de marzo darán sus alegatos los abogados defensores.
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“Nosotros vamos a pedir perpetua para los dos policías que dispararon. Ellos son los autores de lo que fue el asesinato de mi hermano. Por más de que Alarcón no haya dado el tiro certero, para nosotros es igual de asesino. Es más, para la fiscalía también, porque está imputado como coatuor del delito”, adelantó Laciar sobre el pedido que hará su abogado.
Los policías Lucas Gómez y Javier Catriel Alarcón llegaron al juicio imputados como coautores de “homicidio calificado por sus funciones, por empleo de armas de fuego, y homicidio calificado por abuso de su función en grado de tentativa reiterado” contra los amigos de Blas, que iban en el mismo auto.
Los demás oficiales, Wanda Esquivel, Sergio Alejandro González, Yamila Florencia Martínez, Walter Eduardo Soria, Enzo Gustavo Quiroga, Jorge Ariel Galleguillo, Leonardo Alejandro Martínez, Rodrigo Emanuel Toloza, Ezequiel Agustín Vélez, Leandro Alexis Quevedo y Juan Antonio Gatica están acusados de “falso testimonio, encubrimiento por favorecimiento personal agravado por la calidad funcional y omisión de deberes de funcionario público”.
Cómo fue el crimen de Blas Correas
En la noche del 6 de agosto de 2020, según lo que estaba permitido en ese entonces en la ciudad de Córdoba por la pandemia del Covid-19, Blas Correas salió de un bar con amigos, y cuando volvían los cinco en un Fiat Argo, se cruzaron con un control vehicular policial.
Los jóvenes antes habían tenido un incidente con unos motoqueros y, por una mala maniobra, los hombres avisaron a la policía de la extraña situación. Cuando pasaron por el control, los agentes ya sabían de lo ocurrido.
Según dijeron en un primer momento los chicos que iban en el auto, y de hecho lo volvieron a sostener en sus declaraciones durante el juicio, el joven que manejaba esa noche se asustó porque los oficiales tenían sus armas desenfundadas, por lo que en lugar de frenar ante el control, avanzó su auto. En ese entonces, sin reparos, los policías dispararon contra el vehículo y una de esas balas impactó de lleno desde atrás en el omóplato de Blas.
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Asustados ante la situación, los chicos llevaron a Correas rápidamente hacia la clínica Aconcagua, donde no quisieron atenderlo. Por ello, hoy se tramita otra causa que fue elevada a juicio. Los empleados Sergio Casalino, Guadalupe Moya y Paola Andrea Mezzacapo están imputados por “abandono de persona” y “omisión de auxilio”.
Ante la falta de ayuda, los amigos del joven decidieron ir a otro centro médico porque hasta ese entonces Correas todavía respiraba. Sin embargo, pocas cuadras después fueron detenidos por los oficiales que los buscaban tras haber huido del control. Allí mismo un médico constató la muerte de Blas.
