A 15 años de la desaparición de Nicolás Sabena y tras ser declarada culpable de encubrir el hecho por la Justicia de Córdoba a principios de 2021, la expolicía Nancy Salinas fue finalmente detenida para empezar a cumplir la pena en la cárcel de Bouwer.
“Por fin la delincuente y corrupta funcionaria policial Nancy Salinas irá a prisión por encubrir a los delincuentes Vargas Parra que hicieron desaparecer a mi amado hijo Nicolás”, celebró días atrás en las redes sociales Rosa Sabena, madre de la víctima, quien se recibió de abogada y le puso el cuerpo a la causa para que todos los responsables del crimen de su hijo tuvieran su castigo.
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Por el caso, la Justicia condenó en 2014 a una familia entera. José “Pepe” Vargas Parra, considerado culpable de “privación ilegítima de la libertad coactiva agravada por la participación de tres o más personas”, recibió 18 años de prisión. Sus hijos, José “Yaca” Vargas Flores y Lucía “Cori” Vargas Flores, fueron sentenciados a cumplir 17 y 16 años respectivamente. En tanto, el cuerpo de Nicolás Sabena nunca se encontró.
La desaparición de Nicolás Sabena
Nicolás Sabena tenía 21 años cuando desapareció en la ciudad de Río Cuarto después de tener una discusión con su mamá. Las hipótesis de lo que pudo haber ocurrido con el chico, que tenía un retraso madurativo y estaba medicado, fueron tantas como el tiempo que el caso lleva abierto sin encontrarlo.
Su familia cree que los Vargas se aprovecharon de su condición e intentaron usarlo como una suerte de delivery de drogas, pero, cuando él se dio cuenta y quiso irse, lo mataron.
Policía y encubridora
Después de conseguir la condena del clan Vargas, la mamá de Nicolás fue por los encubridores. Así llegó hasta Salinas y el subcomisario Gustavo Oyarzábal, quien fue pasado a disponibilidad el 31 de enero de 2019 (por entonces era jefe de Investigaciones de Río Cuarto) acusado de encubrir el crimen del narco Claudio “Torres”, a quien sicarios balearon cuando salía de su casa.
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Salinas tenía una estrecha relación con los Vargas y era conocida en la fuerza como “Nikita”, por la conocida serie de los ‘90 cuya protagonista era una super agente de una poderosa organización paraestatal.
En plena pandemia de Covid 19, el 19 de febrero de 2021 la Justicia la condenó a tres años y diez meses de prisión por el delito de “encubrimiento por favorecimiento personal agravado por haber sido el hecho precedente un delito especialmente grave y por su calidad de funcionaria pública”. Sin embargo, pudo permanecer en libertad hasta el 2 de febrero pasado, cuando el fallo en su contra quedó firme y ordenaron su detención.
En una entrevista con los medios locales tras la condena hace dos años, la madre de Nicolás Sabena expresó: “Estoy atravesada por el dolor de la desaparición de mi hijo. Cuando uno señala a alguien como culpable, con todas las pruebas e investigación, te siguen tildando de `loca`, ahora se comprueba que tengo razón. Estos policías estaban involucrados en el narcotráfico por eso, defendían a los Varga Parra”.
