Una nena de 12 años fue acosada por WhatsApp por un hombre que se hizo pasar por su tío y la citó en un hotel de la ciudad santacruceña de El Calafate. La denuncia fue presentada por los padres de la víctima, que pidieron que se investigue el hecho.
“Te quería preguntar si me querías venir a ver, porque yo no te veo desde que eras un bebé. Mi habitación es la 77 y tiene una cama grande para vos y para mí”, decía el mensaje que fue aportado como prueba por el matrimonio en la Justicia, y que compartieron también en una entrevista con el portal Ahora Calafate.
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De acuerdo al relato de la madre de la víctima, el acosador se hacía pasar por su “tío Marcelo” y le escribió a su hija desde un celular con característica de Río Gallegos. “Así tenemos cositas”, concluía el mensaje.
La persona que lo escribió no solo sabía el nombre de la chica sino también el nombre del supuesto pariente, que coincidía efectivamente con el de un miembro de la familia de la menor, por lo que al principio ella no desconfió.
Sin embargo, cuando el sujeto dejó en evidencia sus veraderas intenciones la nena se sintió incómoda y le mostró a sus padres el mensaje que había recibido. Su papá entonces fue quien recogió la posta y, simulando ser su hija, respondió para tratar de coordinar el encuentro.
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El plan fucionó en un principio y el abusador le dijo que “estaba por el centro, por el Banco Nación”, pero luego bloqueó el número al sospechar que le estaban tendiendo una trampa.
Según adelantaron en la entrevista con los medios, los padres de la víctima acudirán en las próximas horas a la Fiscalía de Instrucción para pedir que se investigue el caso y se pueda dar con el acosador.
¿Qué es el grooming?: cómo detectarlo y prevenirlo
Es un delito que consiste en el acoso sexual y virtual a niños y adolescentes por parte de un adulto. En general, el acosador simula ser un niño o niña a través de un perfil falso en las redes sociales para establecer una conexión y control emocional con el fin de disminuir las inhibiciones de los menores. A través de distintas técnicas de manipulación, el atacante consigue que el niño se desnude o realice actos de carácter sexual.
Hay que prestar mucha atención al comportamiento de los niños y estar alertas si se observan determinadas actitudes, por ejemplo: si se produce un notable aumento o disminución en el uso de los teléfonos celulares, computadoras o tablets; si el menor muestra respuestas emocionales (risa, enojo, disgusto, etcétera) a lo que ocurre en la pantalla; si oculta la misma cuando un adulto está a su alrededor; si evita o se aleja de situaciones sociales, incluso aquellas que disfrutaba anteriormente; si se vuelve retraído o se deprime; o bien, si pierde interés en la interacción con las personas y actividades.
¿Cómo actuar?
No borrar ningún contenido del teléfono o la computadora que el menor haya recibido, ya que las conversaciones, las imágenes y los videos que se hayan intercambiado con el supuesto acosador, deben ser guardadas como prueba. Sacar fotos o capturas de pantalla para almacenar esta información en otro dispositivo.
No denunciar el perfil del acosador en las redes sociales ya que al bloquear al usuario se puede generar una pérdida de la información necesaria para realizar luego la denuncia e investigación. Además, el atacante puede crear un nuevo perfil y continuar realizando esas acciones con otras víctimas. No amenazarlo dado que eso puede dificultar la tarea de los investigadores.
El grooming es un delito, por lo que se debe realizar la denuncia policial para iniciar la investigación del caso. Ésta puede hacerse presencialmente en una comisaría o fiscalía y también, de manera online, en el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o llamando al 134 o al 0800-33 (FISCAL) 347225.
