Una nena de seis años fue abusada en un colegio religioso de Garín y hay tres casos que están siendo investigados. Las familias de los niños, en base al relato de ellos, apuntan a estudiantes de los últimos años de la escuela secundaria como los agresores.
Los casos se dieron en el Colegio Cristo Rey, ubicado en calle Cabildo 2099. La difusión de un material por WhatsApp alertó a decenas de padres que acudieron a pedir explicaciones a las autoridades.
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Este domingo, la familia de una de las víctimas realizó la denuncia en la Comisaría Tercera de Escobar con asiento en Garín, luego de que la niña pudiera contar la situación que vivió. El hecho fue caratulado como “abuso sexual simple”.
La nena contó que llegó al aula con la pollera rota y que la maestra cosió rudimentariamente la prenda e informó a los docentes, pero no se lo comunicó nunca a los padres de la menor.
De acuerdo a los relatos escalofriantes de las víctimas que, según se informó, son todos alumnos de primer grado, los “nenes más grandes” les sacaron la ropa, hubo golpes en la cola y algunos de ellos también se habrían bajado los pantalones.
Además, otro de los chicos afectados, describió a sus agresores como personas grandes, “de la altura de papá pero con el uniforme de la escuela”. Es por ello que está la firme sospecha de que se trate de alumnos de los últimos años de la secundaria.
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Los hechos ocurrieron en el horario de la tarde en las que los estudiantes concurren a las materias extracurriculares: educación física y religión. En ese momento, los alumnos de primaria y los de secundaria comparten los baños.
El reclamo de los padres
Los padres denuncian que no hubo intervención de los docentes y que tampoco estaban dadas las condiciones para que los chicos pudieran contar lo sucedido ya que la escuela tiene un sistema que se llama “muro de la vergüenza”. Allí los chicos deben pararse delante del resto del curso para sentir vergüenza cuando “se portan mal” o “hacen algo que no está bien”.
Las familias piden que se identifique a los agresores. Desde la institución escolar, les dijeron que les brindarían las imágenes de las cámaras de seguridad pero un padre confirmó que no hay ninguna cámara dentro del establecimiento.
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Aún resta saber si hay más victimas. Las autoridades dijeron que “sino quieren mandar a los chicos que no los manden” y hoy suspendieron las clases, no por los abusos, sino por la protesta que realizaron las familias frente al colegio, que reclaman la intervención de la Inspección General de Escuelas sobre el establecimiento.