Un carnicero paraguayo fue detenido en su país acusado de haber asesinado al empresario español Roberto Fernández Montes en Caballito y haberlo quemado en un descampado en Cañuelas, en enero de 2017.
Se trata de Pedro Ramón Fernández, que fue capturado por agentes de Interpol en la ciudad paraguaya de Concepción y será extraditado hacia la Argentina para enfrentar la acusación en su contra.
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El arresto del carnicero, que tenía orden de captura a nivel nacional e internacional, se concretó este martes al mediodía en la esquina de la avenida Pinedo y la calle San Luis de la mencionada ciudad del país vecino.
Al apresado se le atribuye haber asesinado junto a Santiago Corona, yerno de la víctima, al hombre de negocios Roberto Fernández Montes el 21 de enero de 2017 al mediodía dentro de la vivienda de la víctima, situada en el quinto piso de un edificio ubicado en la calle Aranguren 36, en Caballito.
Tras el crimen, los homicidas envolvieron el cuerpo del empresario con las sábanas y el acolchado de su vivienda con la intención de deshacerse del cadáver. Ese mismo día lo carbonizaron en un descampado de la zona vecinal Los Pozos, de Cañuelas.
Por el brutal homicidio, el mencionado Corona fue condenado a cadena perpetua por el delito de homicidio agravado por alevosía.
“El Carnicero” aparece en los videos llevando el cuerpo del empresario junto al yerno de la víctima. Desde el momento de la detención de Corona, se buscó a Fernández Torres, pero la Justicia nunca pudo dar con su paradero, a pesar de las diversas misiones de policías enviadas por la jueza Alejandra Provitola.
A su vez, para quien aportase datos que derivasen en el arresto del “Carnicero” había una recompensa de medio millón de pesos ofrecida por el Ministerio de Seguridad de la Nación.
Cómo fue el crimen del empresario español Roberto Fernández Montes
El empresario español asesinado, que tenía 67 años, era el dueño de la empresa “Mini Vial”, dedicada a la venta y alquiler de maquinaria para la construcción, y vivía con una de sus hijas en una torre de Caballito.
El hombre de negocios fue visto por última vez con vida el sábado 21 de enero de 2017, cuando salió de ese edificio para ir a su trabajo a las 8:42 y volvió a las 12:09, según lo que registraron las cámaras de seguridad del inmueble.
La clave para esclarecer el caso estuvo en esas cámaras, que fueron revisadas y aportadas a los investigadores por Giselle, la hija menor de la víctima. En esas imágenes se puede ver cómo el presunto asesino, que sería Fernández Torres, ingresó al edificio, esperó tres horas la llegada del empresario y luego bajó el cadáver del hombre junto con quien fuera identificado como Corona.
El cuerpo fue cargado en el baúl del auto que usaba la víctima, que era de su otra hija Natalia y que fue encontrado incendiado en Esteban Echeverría. Mientras que el cadáver calcinado fue hallado al día siguiente en Cañuelas.
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La principal hipótesis es que el crimen estuvo ligado a que Corona quiso evitar que el suegro lo denunciara porque descubrió que lo había estafado en más de un millón de pesos mientras trabajaba para él.
