Tras numerosos reclamos, finalmente la justicia de Tucumán destituyó este jueves al juez penal Juan Francisco Pisa por su polémica actuación en el caso de Paola Tacacho, la profesora de inglés que fue asesinada de al menos seis puñaladas a plena luz del día en la capital de Tucumán por un hombre que la acosaba, Mauricio Parada Parejas, quien luego se suicidó.
La decisión del órgano interpoderes fue tomada por unanimidad. El Jurado de Enjuiciamiento consideró que el magistrado incumplió con los deberes a su cargo por vulnerar el derecho a la tutela judicial efectiva; por no observar las condiciones de vulnerabilidad de Tacacho; y por no abordar con perspectiva de género el tratamiento de la causa.
Paola Tacacho antes de ser asesinada había denunciado a su agresor 15 veces
Es que entre noviembre de 2015 y mayo de 2020, Paola Tacacho realizó 15 denuncias penales contra Parada Parejas, un ex alumno que la acosaba y hostigaba de forma recurrente. El 30 de octubre de 2020 fue asesinada por este hombre, que se quitó la vida tras cometer el femicidio.
Cuando Parada Parejas la apuñaló en la mitad de la calle, lo primero que se supo fue que había evadido una y otra vez las denuncias de Paola. La víctima había peregrinado por fiscalías y juzgados de los tribunales tucumanos pidiendo ayuda durante más de cinco años.
Sólo una de esas denuncias llegó a juicio. En esa instancia actuó el ahora exjuez Pisa, quien sin tener en cuenta el resto de las denuncias resolvió absolver a Parada Parejas, que tenía patologías psiquiátricas y hostigaba a la joven en su casa, su trabajo y en las redes sociales.
Pisa lo favoreció en la causa por “desobediencia judicial” al considerar que no había elementos suficientes para probar que incumpliera las restricciones de acercamiento, a pesar de que Paola presentó testigos que lo vieron merodeando por su casa.
En junio de 2017 lo absolvió y el 30 de octubre de 2020 Parada Parejas mató a puñaladas a la víctima contra la vidriera de un comercio. Secuencia que fue captada por una cámara de seguridad.
El doloroso reclamo de la mamá de Paola Tacacho
“Ningún funcionario va a volver a hacer lo que hizo este juez misógino y sin perspectiva de género”, expresó Mariela Tacacho, mamá de la docente asesinada, luego de que el Jury resolviera la remoción del magistrado penal por unanimidad.
“Logramos que la causa de mi hija no quede en el olvido. Estamos en pie de lucha desde el 30 de octubre, y emprendimos la lucha porque sabemos que era la única manera de enfrentar la impunidad”, agregó la mujer, conmovida por el fallo del jury.
Tras señalar que se sentó un precedente “para que todos los tucumanos vean que si algún funcionario público no cumple con su deber va a ser sancionado”, la mujer subrayó que “el precedente es para todo el país, porque es el primer juez destituido por no aplicar la perspectiva de género”.
“Si a mi hija la hubieran escuchado, hoy mi hija estaría con nosotros. Lo único que sentimos es que se abrió la puerta de la justicia, la que le negaron a mi hija tras cinco años de peregrinar y peregrinar”, dijo Mariela.
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Un reclamo constante por la destitución del juez
El reclamo de justicia por el femicidio de Paola fue constante. Organizaciones de mujeres y legisladores presentaron más de siete pedidos de juicio político, y la Corte Suprema tucumana ordenó una auditoría en el juzgado de Pisa, de la que surgieron varias irregularidades en causas vinculadas a violencia de género.
La acusación contra Pisa sufrió demoras porque el exjuez presentó un pedido de renuncia condicionado al proceso de jubilación, con la intención de evadir el proceso. El gobernador Juan Manzur se la autorizó y eso impidió que las denuncias avanzaran en la Comisión de Juicio Político de la Legislatura.
Pero tras el reclamo de organizaciones de mujeres, se presentó una nueva denuncia después de que la ANSeS negara la jubilación.
La denuncia del Colectivo Feminista de la provincia de Tucumán, firmada por Laura Alejandra del Valle Sánchez y Belén Ortiz, se presentó el 23 de agosto y tres días después se concretó la lectura de la acusación que casi tres meses después devino en la destitución de Pisa.
