Durante la madrugada del sábado, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires desarticuló tres fiestas clandestinas en los barrios de Palermo, San Telmo y Monserrat. En estos sitios se contabilizaron más de 350 personas y fueron clausurados por la Agencia Gubernamental de Control (AGC).
Los procedimientos se dieron en el marco de los diversos recorridos que la AGC realiza cada madrugada junto a los efectivos de la División Operaciones Especiales Requeridas y del Departamento Contravenciones y Faltas. En uno de estos lugares -ubicado en Venezuela al 500- se encontró una reunión con 216 personas aglomeradas en un pequeño espacio.
Algo similar ocurrió en San Lorenzo al 300, en donde tras escucharse música en alto volumen y reflejarse las luces de colores a través de la ventana de la puerta principal, los vecinos denunciaron lo que estaba aconteciendo. Bajo la supervisión de la AGC y la Unidad Operativa de Fiscalización Integral, la Policía de la Ciudad ingresó y constató que 126 personas incumplían la normativa vigente. La capacidad del sitio era de 25 personas.
Allí, el local fue clausurado por funcionar fuera del horario permitido y poseer exceso de capacidad. Finalmente, en Nicaragua al 4400 se desbarató un café que estaba funcionando fuera de su horario habitual, con 20 personas en su interior.
Las tres causas son investigadas por la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Nº11, a cargo de la doctora María Valeria Masaglia, secretaría Única a cargo de la Angélica Pérez Burgos, que imputó a los propietarios de los lugares por infracción a los artículos 205 y 239 del Código Penal de la Nación.
Ayer se registró un episodio similar a estos en la provincia de Córdoba. En el barrio María Lastenia de la ciudad capital se detectó una fiesta clandestina en la que participaban más de 250 personas.
Ocurrió precisamente en la Avenida Juan B. Justo al 7100, sitio en el que funciona un complejo de canchas de fútbol, informaron fuentes policiales. Según la información oficial, los organizadores cobraban $300 en concepto de entrada.
Al lugar arribó la Policía de Córdoba, alertada por una serie de denuncias de vecinos que señalaron un intenso movimiento y ruidos en la zona. Se registraron más de 100 vehículos estacionados. Los efectivos policiales incautaron la caja registradora y liberaron a la totalidad de los participantes.
En Córdoba permanecen prohibidas las reuniones sociales y familiares, cualquiera sea el número de participantes, en el marco de las medidas restrictivas para contener la pandemia de coronavirus.
