Por desesperación, los vecinos de Villa Raffo en el partido de Tres de Febrero tomaron una decisión drástica: cerraron una de las calles del barrio para evitar que los asalten. Es que en el último tiempo fueron víctimas de varios robos y es la única manera que encontraron para impedirlo.
Se trata de la calle Cabo García al 2300 esquina 15 de agosto, muy cerca de la cancha de Almagro. Con bidones, ramas y palos, bloquearon el acceso y creen que con esto los ladrones que andan en auto y en moto no van a poder pasar. “No sabemos más que hacer, no hay policías y desde el municipio no nos escuchan. Hicimos muchos reclamos pero no recibimos respuestas”, contó indignada Yamila a TN y La Gente.
El último de los hechos ocurrió el martes 8 de junio minutos después de las seis de la tarde y quedó grabado por las cámaras de seguridad que ellos mismos instalaron para protegerse. En las imágenes que compartieron en el portal de periodismo ciudadano, se puede ver que una mujer estaciona su vehículo frente a una casa donde la estaba esperando su hijo de seis años que lamentablemente vio cómo su mamá era amenazada de muerte. Aparecieron en escena dos motochorros que la obligaron a descender y a punta de pistola le sacaron las llaves y el celular.
A pesar de que la víctima no se resistió le gatillaron dos veces pero las balas no salieron o el arma estaba descargada. Un grupo de mujeres que también fue testigo de todo, le gritó a los ladrones que no le hicieran nada. Lo cierto es que en cuestión de segundos, le robaron el auto y escaparon.
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Una vez que se fueron y mientras ayudaban a la víctima que estaba en shock, pasó por la puerta un patrullero y con señas le explicaron lo que había pasado. Los policías salieron a perseguirlos, pero hasta el momento no fueron detenidos.
Pero este no es el primer robo que hay en la zona. Hace poco más de un mes, también fue asaltado un vecino que estaba con el auto en la puerta de su casa. Este hecho también fue registrado por las cámaras de seguridad que ellos pagaron, ya que el domo que puso el municipio no funciona.
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Los cierto es que ya cansados, el miércoles 9 de junio hicieron una protesta y cortaron una de las calles. “Así no se puede vivir más. No hay patrulleros, nos se ve a ningún policía. Nadie nos cuida. Los robos son prácticamente a diario. Por eso decidimos salir a la calle para que nos escuchen y por sobre todo para pedir seguridad porque necesitamos vivir tranquilos”, concluyó la mujer.
