Los Brujos están listos para una noche de acción, con mucho “beatcore”, donde celebrarán los 30 años de la salida de su disco debut, Fin de semana salvaje. El viernes, el grupo subirá al escenario del Teatro Broadway para repasar su importante repertorio.
La banda formó parte del llamado Nuevo Rock Argentino que surgió a principios de los ‘90 junto a bandas como Babasónicos, Peligrosos Gorriones, Juana La Loca, Tía Newton, entre otras. Formados en 1989, Los Brujos estuvieron en actividad hasta 1998 y publicaron los trabajos San Cipriano (1993) y Guerra de nervios”, (1995), además de Fin de semana salvaje (1991). Volvieron a la actividad en 2014 con una serie de shows y un nuevo álbum, Pong, con canciones que habían quedado de los primeros años.
“Estamos con muchas ganas porque el Broadway es un lugar donde nos sentimos muy cómodos. En los primeros años de trabajo tuvimos una vinculación estrecha con el ambiente teatral, eso nos fue nutriendo y moldeando también, desde el comienzo hubo una fluida interacción con actores de la escena under de fines de los ‘80″, describió ...
- ¿Cómo podés definir a este show de Los Brujos?
- A 30 años de nuestro disco debut, decidimos hacer un planteo que nunca hicimos, seccionar el recital en forma cronológica respetando las ediciones y versiones de los discos, será un extracto de la trayectoria del grupo y contaremos con algunos amigos invitados.
- ¿Qué se siente sobre el escenario luego de tantos años de carrera?
- Siempre distinto y a la vez no deja de ser una mutación de la energía primal del grupo, un ida y vuelta con la gente con la complicidad y la incertidumbre de generar juntos emociones y nuevas percepciones que podamos llevar a casa después del show.
¿Están trabajando en nuevas canciones?
Si tenemos un nuevo disco en proceso, del cual tocaremos tres canciones el viernes en el teatro.
La historia detrás de “Kanishka”, la participación de Gustavo Cerati y Daniel Melero, más el recuerdo del show con Nirvana
- Su disco debut cumple 30 años ¿Qué representó ese trabajo donde participaron como invitados Gustavo Cerati y a Daniel Melero?
- Fue muy importante para nosotros. Si bien veníamos tocando mucho desde hacía tres años y sabíamos que tarde o temprano iba a pasar algo con el grupo, la orientación de Gustavo y Daniel en algunos aspectos de la industria nos ayudó a encarar lo que se venía, aunque las cosas de la popularidad cada uno las transita a su modo.
- “Kanishka” sonó por todos lados...¿Pensaron que sería un hit cuando la compusieron?
- Creo que sí, es de los primeros temas del grupo, y en ese momento la decisión era hacer solo un par de shows, disolvernos y seguir con otros proyectos, así que eran canciones exprés, instantáneas. Un complemento de la puesta en escena también. Cuando hicimos nuestra primera aparición en televisión podíamos tocar solo una canción y elegimos “Kanishka”. Algo le vimos.
- Junto a otras bandas como Babasónicos, Peligrosos Gorriones, Juana La Loca, Tía Newton, entre otros, formaron parte de un movimiento que se lo llamó “Nuevo Rock Argentino” ¿Qué significado tuvo y cuál fue su legado?
- Para nosotros fue una cuestión circunstancial, una necesidad de otros, de querer nuclear en un solo título cosas que venían pasando de hace años con Los Brujos, Massacre y Juana la Loca, con bandas emergentes afines. Fue una idea de Ale Almada que trabajaba con nosotros, y de pasar a girar solos por Argentina, pasamos a girar en forma de festival. Fue bueno para que todas las provincias estuvieran enteradas de una nueva generación de músicos post ‘80. Dejo su legado en discos y videos que nuevas generaciones hoy descubren y hasta pueden darse el gusto de ir a ver bandas que todavía siguen tocando. Obviamente en el planteo de nuestro show del Broadway, la cronología hace que el primer bloque refiera a ese momento de los ‘90.
¿Qué representó tocar como invitados en el show de Nirvana en Vélez?
- Fue muy emocionante y acorde a nuestra energía. Necesitábamos medir al grupo ante semejante audiencia y además salir al escenario y ante el primer acorde ver que tenés un estadio a favor te prende fuego. Fue un gran momento en nuestra etapa de los ‘90.
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- ¿Cuál fue el mejor momento y el peor para Los Brujos?
- Mirando hacia atrás y repasando, cada momento tuvo su yin y yan, desde la gestación hasta los discos y giras tiene su costado genial y su costado no. Desde un comienzo entendimos que lo nuestro era navegar el caos que nos permitía enfrentarnos a lo desconocido y de ahí retroalimentarnos. Lo mejor es ver que formamos una personalidad propia, en conjunto, que amplía la percepción de cada integrante, lo que hace que formar parte del grupo sea una experiencia única e irrepetible. El peor momento para nosotros fue sin duda despedir a Ricky en su viaje intergaláctico, desde la vuelta en 2014 pasamos tres años increíbles con él y lo sentimos entre nosotros hasta en el escenario. Forma parte de la energía que mueve los shows, sentimos que volvieron a ampliarse las dimensiones en las que interactuamos.