J Balvin desató una fiesta en Buenos Aires "con altura" y mucho reggaetón

"Y si el pueblo pide... ¡reggaetón, reggaetón!", fue la frase que coreó todo el Arena de Villa Crespo en el inicio del concierto de J Balvin, que salió al escenario pasadas las 21.30. Con localidades agotadas, el músico puso a bailar a sus fans, a quienes no veía desde noviembre del año pasado.

"El niño", como se hizo llamar en el último tiempo, no solo deslumbró con su performance. Preparó un escenario con una escenografía imponente que tenía como protagonista un muñeco gigante. El juego de luces también dio que hablar.

El colombiano no se guardó ninguno de sus hits. Uno de los momentos más efusivos de la noche fue cuando entonó sus estrofas de "Con altura", el tema que hizo con Rosalía. La imagen de la española apareció de fondo en una de las pantallas.

J Balvin demostró que sigue siendo el mismo chico humilde de sus inicios. Aprovechó algunos minutos de su concierto para rendirle homenaje a sus maestros y bailó al ritmo de "La Gasolina", de Daddy Yankee, y "Rakata", un clásico de Wisin y Yandel.

José Álvaro Osorio, como figura en su partida de nacimiento, se emocionó al recibir a un invitado muy especial. Se trata de Marciano Cantero -de Los enanitos verdes-, a quien definió como "una de las leyendas del rock argentino".

El compatriota de Maluma se rindió ante las 15 mil personas que se hicieron presentes en Villa Crespo para escucharlo. De lo que no tenía idea es que entre medio de esa multitud estaba Diego Armando Maradona, un fiel seguidor de su música.

"Quiero agradecerles a todos los que eligieron estar acá esta noche", dijo el reggaetonero antes de darle un cierre a su concierto, que formó parte de su Arcoiris Tour.