Justin Bieber le toca vivir situaciones extremas todo el tiempo. Las giras maratónicas, los shows intensos, la locura de sus fans y los choques con la prensa son moneda corriente su la rutina. Parecía que tenía todo bajo control. La semana pasada mostró su parte más sensible durante su showen Frankfurt, donde se emocionó mientras cantaba “Purpose”.
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Volvió la acción. Antes de su show en el Palau Sant Jordi, le pegó una trompada a un fan que le tocó la cara metiendo la mano por la ventanilla de su auto.
Bieber se encontraba solo en la parte de atrás, que iba a poca velocidad, ante la presencia de numerosos seguidores. El joven agredido, con el labio ensangrentado, no lo podía entender: "Le toqué la cara y me pegó".
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El canadiense reunió cerca de 18.000 seguidores en Barcelona durante la primera parada española de la gira "Purpuse World Tour" que también llegará a Madrid.
