Milo J estrenó La vida era más corta, su nuevo disco que sin dudas se posiciona como una de las producciones musicales más desafiantes de la escena nacional actual.
A lo largo de las 15 canciones del tracklist, el joven artista hace un viaje sonoro a las raíces de la cultura argentina y homenajea al folklore con letras cargadas de sensibilidad, memoria e identidad nacional.
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Para eso, Milo J contó voces históricas del género como Cuti y Roberto Carabajal, Mercedes Sosa y Soledad Pastorutti. Además se sumaron artistas fundamentales de la música contemporánea como Trueno, Paula Prieto y la chilena AKRIILA.

Cada una de las canciones cuenta con videos impactantes y conmovedores que le permiten al oyente adentrarse por completo al universo de La vida era más corta: transmiten el sufrimiento, la memoria, la identidad y la resistencia con imágenes grabadas en Santiago del Estero.
Sobre la elección de esta provincia, Milo J explicó: “Para mi familia tiene mucho significado. La abuela de mi mamá era santiagueña y se vino a los 12 años a Buenos Aires para construir una nueva vida porque allá es todo muy difícil. Hay de todo menos oportunidades. Y es por eso que por este medio sigo escribiendo esta historia”.
Uno de los visualizer que más conmocionan al alma es “Bajo de la piel” que fue grabado en un cementerio ancestral. Su concepto seguramente está enlazado con el nombre del álbum, ya que se representan vidas largas que quizás -por su sufrimiento y sus heridas- podrían haber sido más cortas.
Tal fue el compromiso tanto de Milo J como de su equipo que buscaron hacer un casting real de pobladores locales que luego son quienes aparecen en cada uno de los videos. “Todos los que participaron nos contaron que gracias a esta iniciativa ahora el mundo se iba a enterar que esas personas existieron y siguen existiendo en nuestras memorias, en las canciones y en las reuniones”, dijo el músico.
El artista será el más joven en conquistar el escenario del Estadio Vélez el 18 de diciembre, donde presentará por primera vez La vida era más corta.
Las colaboraciones de “La vida era más corta”, el nuevo disco de Milo J
Desde chiquito, Camilo Joaquín Villarruel estaba nutrido en su casa con canciones del folklore argentino. Sin embargo, aquel pequeño nacido en octubre de 2006 también se influenció de géneros como el punk, el rap, el hip hop y el rock. Todos esos sonidos no solo lo identifican sino que lo diferencian como artista de la escena contemporánea.
Su compromiso con la identidad y la memoria cultural son actitudes que siempre lo destacaron en la industria. Ahora, con el lanzamiento de La vida era más corta, Milo J pudo hacer la propuesta más desafiante de su repertorio y reunir todo aquello que lo apasiona y lo moviliza.
“Bajo la piel”, la primera canción del tracklist, lo tiene al artista como protagonista del videoclip y abre la puerta a una narrativa que está marcada por la resistencia y la memoria de los pueblos. La primera colaboración del álbum aparece en “Gil” junto a Trueno, en la que cantan: “Todo puede pasar, pero ‘todo pasa’ me dijo mi mamá. Yo quiero al barrio feliz, sé que mis valores no me traicionan”.
Soledad Pastorutti aporta su inconfundible voz en “Lucía”. “Tras las nieblas y al anochecer te vi correteando, te iba siguiendo los pies. Sos la leyenda que se ha de escuchar, sos la luz del bosque que me logró encandilar”, expresa la artista en parte de la letra.
El viaje musical que fusiona la estética moderna con sonidos folklóricos y tangueros continúa con “MmmM”, el tema que Milo J grabó junto a la cantautora Paula Prieto quien aporta profundidad y sensibilidad al disco. Luego, en “Llora Llora”, la octava canción, aparece AKRIILA para sumarle su tinte disruptivo a la sonoridad del disco.
Radamel, el joven artista santiagueño de 14 años colaboró con su voz en la canción que lleva su nombre y que dura exactamente 1 minuto 22 segundos. Así, le sigue “El invisible” con el aporte de los históricos Cuti y Roberto Carabajal. “Soy el invisible, el que nunca ha sido. Bienaventurados, benditos los ricos, consiguen de todo con el apellido”, dicen en una de las letras que más relatan las injusticias entre las clases sociales.
Silvio Rodríguez, figura de la música cubana, suma su talento en “Luciérnagas”, canción que se acompaña con un video movilizador que le hace honor a su nombre. Por último, el álbum cierra con “Jangadero” con Mercedes Sosa cuya voz aparece en fragmentos de estudio y se entrelaza con el presente de Milo J. En este videoclip vuelve a aparecer el artista -al igual que al principio- y cierra con una conmovedora frase: “Mercedes vive para siempre, patrimonio de nuestra humanidad”.