La mansión que Ricardo Montaner y su esposa Marlene Rodríguez Miranda comparten en Miami permite albergar a su gran familia cada vez que los visita: tiene una sala de estar gigante, ocho habitaciones, un jardín tropical, piscina e incluso un muelle de madera sobre el Océano Atlántico.
Ricardo Montaner y Marlene Rodríguez Miranda se vieron por primera vez en el casamiento de ella, donde el artista argentino había sido invitado como un cantante promisorio. Muy poco tiempo después se reencontraron, cada uno ya separado de su primera pareja (a ella le duró seis meses el matrimonio), y trabajaron juntos en un videoclip de él.
Leé también: “No soy curandera”: el día que a Gilda le agradecieron haber sanado a una mujer
Así nació un amor que ya lleva más de tres décadas. El artista nacido el 8 de septiembre de 1957 en Valentín Alsina se casó con Marlene el 26 de junio de 1989 en la Playa Puerto de la Cruz, en Venezuela. Tienen tres hijos también dedicados a la música –los famosos Ricky, Mau y Evaluna- y dos nietos, Índigo y Apolo.
Marlene no solo es la hija del dueño de la empresa discográfica venezolana Sonorodven (que grabó los primeros discos del cantante) y de la mayor cadena de radios, FM Center, sino que también se convirtió en la productora y directora de sus videoclips hasta hoy. Una exitosa relación de amor y trabajo que lleva 34 años, sin fisuras.
Leé también: Ricardo Montaner y su amor con Marlene Rodríguez, una relación que nació prohibida
Fue justamente en Venezuela donde Ricardo Montaner, que vendió más de 25 millones de discos en todo el mundo, logró sus más grandes éxitos, tanto en la música como en la televisión, protagonizando telenovela y películas. Sin embargo, a medida que aumentaba su fama internacional, decidió instalarse con su familia en Miami.
Una mansión casi centenaria
La mansión en Miami fue construida en 1939 en estilo Art Decó, con enormes ventanales en forma de arcos, en el exclusivo barrio de Pine Tree Drive, donde viven varias celebrities. Tiene dos plantas y está rodeada de un frondoso jardín tropical, que limitan con un canal hacia un lado y el espléndido Océano Atlántico del otro.
La propiedad, a la que la familia llama Casa Montaner, tiene 700 metros cuadrados y hoy en día está valuada en 11 millones de dólares. Sin embargo, el cantante la compró en 2001 por poco más de dos millones de dólares.
La sala de estar es gigante, con un bar en un extremo y equipos de música en el otro. En el medio, confortables sillones y mesas ratonas con libros, sobre una importante alfombra en tonos azules.
Leé también: “El lujoso cumpleaños de Evaluna Montaner: en un yate y rodeada de toda la familia”.
Uno de los espacios más usados para reuniones de la familia o con amistades es el jardín de invierno, vidriado y lleno de palmeras y luces. Además, Ricardo Montaner contó en varias oportunidades que en una de sus mesas encuentra siempre inspiración para crear sus canciones.
Además, la mansión tiene una sala de juegos y ocho habitaciones con sus respectivos baños, para todos los integrantes de la familia, incluso los hijos mayores del artista, Héctor y Alejandro, de su primer matrimonio de más de una década con Ana Vaz.
La piscina de la mansión de Ricardo Montaner, de película
El matrimonio Montaner publica sus momentos familiares en Instagram. Y, con sus hijos y sus nietos lejos, son sus perros los protagonistas de sus videos. Por lo general, el espacio donde juegan es junto a la enorme piscina de agua cristalina, rodeada de frondosa vegetación.
Ricardo Montaner contó repetidas veces que vive en su casa soñada, pero que su lugar favorito es el muelle junto a un enorme espejo de agua. Por eso compartió: “Allí busco la paz caminando descalzo y sintiendo el crujir de las maderas con cada uno de mis pasos”.
