Desde hace tres años este par está causando sensación en las calles de Cali, luego de que David tomara la decisión de adaptar un sidecar a su motocicleta Harley Davidson, para salir de paseo en compañía de su mascota ya que no quería dejarlo solo.
Pero, no se trata solo de paseos sino que han llevado sus recorridos al plano solidario ya que David en compañía de su perro Max (el Golden Retriever), salen juntos a compartir croquetas y alimento por la ciudad para los animales sin hogar cada vez que se les presenta la oportunidad de hacerlo.
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Según relató el protagonista de esta historia al diario El Tiempo, él trabaja en una empresa de amortiguadores en la autopista sur de la ciudad de Cali (Colombia) y el tiempo libre del que dispone ha convertido su prioridad en darle una mejor calidad de vida a su mascota. Esto se ha ido constituyendo en una de sus mejores aventuras.
“Pienso que hay que salir con los animales y no siempre dejarlos en la casa. En el gremio motero tenemos la oportunidad de ir a muchos destinos”, expresó Guzmán al periódico local.
Además, el hombre comentó que su mascota es un amigo terapeuta, lo que describe como un apoyo para la depresión y la ansiedad. “Podemos salir con nuestros perritos y siempre usar los implementos de seguridad para que ellos tengan un viaje seguro. Por eso, hace tres años decidí instalar un sidecar en mi moto, de manera que pudiera viajar con mis mascotas sin problema”, explicó David.
Max, el perro más afortunado
Max es el nombre del Golden Retriever que encontró refugio en su dueño luego de perder a su mamá a causa de un ataque al corazón. Según contó David, los animales compartieron poco tiempo juntos, ya que a los 11 meses de edad fue cuando el Golden tuvo que vivir la partida de Luna, la primera perrita de David.
Pero, de a poco, ambos se convirtieron en compañeros inseparables y toda una sensación en la ciudad. A donde vayan causan furor y los vecinos se acercan a tomarse fotografías.
Las historias de sus viajes
Max es uno de los pocos caninos afortunados que cuentan con la posibilidad de sacar la lengua en la brisa en cada paseo, pero esto es posible debido a que David instaló un accesorio que va atornillado a la moto.
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Según ha relatado David a los medios locales, uno de sus paseos más importantes con su perro fue cuando conocieron Pereira juntos, en octubre del año pasado, donde recibieron un reconocimiento por originalidad, luego de emprender el recorrido de cuatro horas hasta la ciudad disfrazados de Batman y Superman.
